Las condiciones que establezcan hondas diferencias entre la banca nacionalizada y la privada deben brillar por su ausencia en el proceso de rompimiento del monopolio estatal de las cuentas corrientes y el acceso al redescuento.
Así lo expresaron ayer dos banqueros, un financista y un representante del sector privado cuando fueron consultados sobre los requisitos que el directorio político del Partido Liberación Nacional (PLN) acordó antenoche a cambio de que ambos beneficios sean otorgados también a los bancos privados.
No obstante, todos ven con muy buenos ojos el cambio de rumbo que los líderes liberacionistas están tomando en relación con un tema que ha sido un dogma para dicha agrupación.
Entre los requerimientos planteados por los verdiblancos se establece que para poder gozar del redescuento (crédito de última instancia que otorga el Banco Central a los bancos cuando estos tienen problemas de liquidez), la banca privada tendría que prestar un 30 por ciento de las captaciones a un plazo menor a 30 días a los bancos comerciales del Estado.
Igual condición se aplicaría en materia de cuentas corrientes, además de que tales entidades financieras deberían dar un aporte de las captaciones para financiar la banca de desarrollo.
Redescuento para todos
Para Francisco Lay, gerente del Banco Metropolitano, esas cláusulas impedirían a los bancos privados el manejo de cuentas corrientes. Explicó que sería así debido a que tras cumplir con todos los requerimientos, tales instituciones quedarían con limitados recursos que tendrían que ser colocados a un costo muy alto.
"En mi opinión, siempre debe haber un marco regulatorio importante que establecer, pero que no incluya condiciones como estas. Las condiciones deben ser iguales para todos los bancos", manifestó.
Carlos Alvarado, gerente general del Grupo Financiero Elca, declaró que es un error atar el uso de la cuenta corriente al apoyo que se le pueda brindar a la banca de desarrollo.
"Pretender mezclar banca comercial con banca de desarrollo es obligar a los intermediarios financieros a realizar actividades para las cuales se requiere un perfil de institución diferente. Esto provocaría distorsiones con efectos negativos", expresó.
En cuanto al redescuento, Javier Filloy --gerente del Banco del Comercio-- y Marco Vinicio Ruiz --presidente de la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones de la Empresa Privada (UCCAEP)-- coincidieron en que este no es un privilegio que se le debe conceder a unos y a otros no.
Ambos sostuvieron que todos los intermediarios financieros deben tener acceso a dicho instrumento de liquidez que ayuda a los bancos en tiempos de crisis y beneficia, por ende, a los ahorrantes.