Ganaderos y agricultores de la faja costera del Pacífico sufren por la falta de aguaceros en un invierno que se prevé como uno de los más secos de los registros.
Las tres regiones de esa faja (Pacífico Norte, Pacífico Central y Pacífico Sur) ya presentan pérdidas de cosechas y, además, se estima que el próximo verano será una etapa complicada.
Así lo advirtieron los directores regionales del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) y también informes del Instituto Meteorológico Nacional (IMN).
La preocupación por la escasez de lluvias se sustenta, por ejemplo, en un déficit del 65% con respecto al promedio histórico en la Región Pacífico Norte en los primeros siete meses del año. Ese es el segundo mayor de la historia, solo superado por el de 1977 con un 72% y en los dos casos el causante fue el fenómeno de El Niño, según el IMN.
El déficit récord del mes de julio pasado es todavía más significativo. Cayeron solo tres milímetros de lluvia, según la estación de Liberia, y se esperaban más de 150 milímetros. Eso hace que julio de este año sea el más seco desde 1940.
En el Pacífico Central y Sur, en tanto, se estima una caída del 40% de las lluvias en lo que va del año.
Amenaza. Esta condición genera una sequía que ya causa las primera pérdidas en ganadería, granos básicos (arroz, maíz), caña de azúcar, frutas (sandía y naranja), leche, ganadería de carne y miel de abeja, de acuerdo con los análisis preliminares del MAG.
Además, se prevé que el ganado tenga una reducción de peso.
Los directores regionales del MAG, entre ellos Roy Rojas, encargado del Pacífico Sur, y Nelson Kooper, de la Región Central Occidental, ya planean acciones para paliar el impacto. En ocasiones, los funcionarios recomiendan a los productores abstenerse de sembrar para evitar una doble pérdida.
CoopeGuanacaste, en tanto, dijo que la generación eléctrica ha caído un 10% en lo que va del 2014 con respecto a igual periodo del 2013, pese a que la planta está en Canelete de Upala, donde sí llueve.