La Contraloría General de la República señaló una serie de debilidades en el Fondo de Préstamo a Productores, manejado por la Corporación Bananera Nacional (Corbana) y que se nutre con recursos propios de esa entidad.
El fondo fue creado dentro de la ley de Corbana, una entidad pública no estatal, para ayudar a los productores de la fruta.
Según el informe DFOE-EC-IF-01-2014, se encontraron debilidades en la normativa vigente emitida por Corbana y aplicable en el otorgamiento de créditos a los productores bananeros, dado que existe un vacío en cuanto a la regulación de los préstamos concedidos a quienes dejan la actividad bananera.
Adicionalmente, se encontraron debilidades vinculadas con el establecimiento de límites en la aprobación de líneas de crédito para el pago de aguinaldos de las empresas productoras de banano y de la línea de crédito para emergencias y desastres naturales, así como con la gestión de las garantías fiduciarias y de la capacidad de pago de los fiadores.
Jorge Sauma, gerente general de la Corporación, aseguró que el informe es muy positivo, porque no evidencia problemas de operación en materia crediticia. “Lo que señala la Contraloría son oportunidades de mejora en nuestra reglamentación, las cuales serán acatadas de inmediato”, expresó.
El presidente de la Cámara Nacional de Productores Independientes de Banano (Anaproban), Édgar Quirós, aseguró que no hay ninguna debilidad en ese sistema, el cual ayuda mucho a los productores en fin de año, cuando deben pagar aguinaldos y vacaciones.
Agregó que de inmediato el productor que pide el préstamo autoriza a la compañía comercializadora a reducir un monto por cada caja exportada para pagar la deuda.
“La única debilidad que hay es la de criterio, de la Contraloría”, aseveró Quirós.
El fondo tiene actualmente una cartera de $14 millones (unos ¢7.756 millones al tipo de cambio actual).
En detalle. La Contraloría advierte de que el reglamento del Fondo de Préstamo a Productores es omiso en cuanto al manejo que debe darse a las condiciones que aplican a un deudor que dejó de ser productor bananero. La omisión se da tanto si sigue atendiendo la deuda como si busca alguna modificación en el crédito originalmente concedido.
Eso causa un riesgo potencial de que la Administración se aparte “de las sanas prácticas de gestión de crédito”, detalló la auditoría. Agregó que no hay reglamentación interna para guiar el manejo de casos de ese tipo.
Además, el informe solicita un mejoramiento en los controles de los límites de aprobación de la línea de crédito para pago de aguinaldos de empleados de las empresas bananeras y línea de emergencias y desastres naturales.
Sauma consideró que la reglamentación es una herramienta que debe estar sujeta a mejora continua y cualquier observación en ese sentido se evalúa técnicamente.
Agregó que Corbana está en la mejor disposición para acatar las recomendaciones que plantea la Contraloría en este caso.
Las condiciones para esos préstamos son muy parecidas a las de cualquier banco, añadió. Se deben presentar, detalló, estados financieros, garantías, flujo de caja positivo y capacidad de pago.