Una fuerte discrepancia entre Honduras y Nicaragua, a las 10:30 a.m. de ayer, obligó a representantes políticos y económicos del istmo a iniciar una ardua discusión en aras de definir un acuerdo sobre negociaciones comerciales con México.
El fruto de tales gestiones fue cosechado a las 6:30 p.m., cuando se aprobó una propuesta por consenso cuyo objetivo principal es llegar a un tratado de libre comercio Centroamérica-México, tomando como base las conversaciones y convenios existentes.
Estos aluden a la reactivación de las negociaciones entre la nación azteca y el Triángulo del Norte (Guatemala, Honduras y El Salvador), y al diálogo de cuatro años entre nicaragüenses y mexicanos, pronto a culminar con la firma de un pacto.
Asimismo, al Tratado de Libre Comercio Costa Rica-México (TLC), suscrito en 1994, y las pláticas que muy pronto iniciarán los gobiernos de Ernesto Zedillo y Ernesto Pérez Balladares, de Panamá.
Como parte del acuerdo de ayer, se definió que estos diferentes procesos bilaterales --con excepción del de Costa Rica, que rige desde enero de 1995-- sean acelerados en aras de que luego sean unificados --aunque no de fijó una fecha-- en un solo convenio regional por los ministros de Economía y Comercio.
De esta manera, ministros de Relaciones Exteriores y Economía, y técnicos en materia comercial allanaron el camino para la reunión de gobernantes de Centroamérica y México --denominada Tuxtla Gutiérrez II--, la cual comenzará hoy, a las 11 a.m., en el hotel Herradura.
La decisión del istmo fue avalada, en principio, por los representantes aztecas. Así lo confirmó Jaime Zabludovsky, subsecretario de Negociaciones Comerciales Internacionales de México.
Sin embargo, la última palabra la tendrá Ernesto Zedillo, quien arribará a territorio costarricense hoy, a las 10 a.m. (Nota aparte con el programa de llegada de los demás gobernantes.)
La fuerte discrepancia entre representantes hondureños y nicaragüenses se originó cuando el ministro de Economía de Honduras, Fernando García, propuso que Nicaragua echara marcha atrás en las avanzadas negociaciones comerciales que lleva a cabo con México y se adhiriera a las incipientes pláticas del Triángulo del Norte.
El canciller nicaragüense, Ernesto Leal, fue claro en su posición: "Uno no puede arrancar de cero cuando lleva cuatro años de negociaciones con un país."
La divergencia obligó a representantes políticos y económicos del área a empezar de inmediato negociaciones en procura de una posición conciliatoria.
Por Costa Rica participaron los ministros de Economía, Industria y Comercio (MEIC), Marco Vargas, y Comercio Exterior (COMEX), José Rossi; también Amparo Pacheco, negociadora comercial de COMEX --quien redactó la propuesta que fue aprobada--, y Laura Rodríguez, directora de la oficina de integración del MEIC.
Aunque fue el funcionario que encendió la mecha de la polémica, el hondureño Fernando García, asumió al final de la jornada una actitud más de consenso: "La regionalidad y la integración deben ser siempre lo primero, pero hay que admitir que hay realidades y negociaciones previas; entonces hay que hacer converger todo."
Consultados sobre cómo se logrará la convergencia de los diversos convenios México-Centroamérica, los ministros Vargas y Rossi manifestaron que de cada tratado habrá que tomar lo mejor y más conveniente para el istmo.