El sector financiero teme que el incremento en los impuestos a los intereses, recompras y dividendos, entre otros, que contiene el plan fiscal que presentó, el lunes pasado, el Gobierno, desincentive el ahorro en el país.
Esta es una de las principales preocupaciones que expresaron jerarcas de distintas entidades.
El ministro de Hacienda, Fernando Herrero, ha explicado que la propuesta en el impuesto sobre la renta busca simplificar el sistema y por ello se establece una tasa única para este tipo de ingresos.
Además, ha señalado que la reforma pretende que contribuyan más los de mayores ingresos, y son los hogares con más recursos los que tienen estos ahorros.
Una es que les resta competitividad financiera a las inversiones en Costa Rica. “Hay muchos países en los cuales los ahorrantes no pagan ningún tipo de impuesto, y eso hace atractivo que ticos quieran invertir en esos mercados”, dijo.
El otro temor es que todos los intermediarios financieros sean tratados por igual, pues, si el impuesto sube, las diferencias actuales se van a agudizar.
Actualmente, los intereses de los depósitos del Banco Popular y las mutuales no pagan el impuesto de 8%. El plan fiscal propone que sean incluidos y que suba al 15%.
Marco Garro, asesor económico de la Cámara de Bancos e Instituciones Financieras de Costa Rica, también mostró preocupación por el efecto del incremento de los tributos en el ahorro.
“Esta medida, por un lado, desestimula el ahorro y la inversión, por cuanto cada ahorrante ahora deberá pagar más impuestos y recibir menos rédito por sus ahorros; y por otro lado, (...) encarecerá el costo del insumo principal del crédito, como lo es la captación de fondos”, dijo Garro.
Un temor similar expresó Franco Naranjo, presidente de la Asociación Bancaria Costarricense.
“El aumento del 8% al 15%, propuesto en el paquete de impuestos del Poder Ejecutivo, va a incentivar a un menor ahorro de las personas, resultando en márgenes mayores de intermediación financiera, al comparar el interés neto que reciben los ahorrantes y el interés que pagan los deudores”, expresó.
Por su parte, Gerardo Corrales, gerente del BAC San José, comentó que en su opinión habría sido mejor eliminar el sistema cedular y pasar a un sistema de renta global. “Las dificultades de negociación política, me imagino, han conducido a generar este parche”, agregó.
José Rafael Brenes, gerente de la Bolsa Nacional de Valores, comentó que la mayor preocupación es el aumento de 5% a 15% en los dividendos, pues este es un impuesto sobre otro impuesto (el de la renta que se paga antes).
Víctor Chacón, director ejecutivo de la Cámara Nacional de Sociedades de Fondos de Inversión, señaló que escudriñan el plan.
“Debemos analizar detenidamente el impacto de los cambios en la industria y, como consecuencia, en los activos de los pequeños y medianos ahorrantes”, comentó.