El intento lo harán en la cumbre de jefes de Estado y Gobierno que se celebrará en Bruselas este jueves.
El último borrador de conclusiones refleja un consenso de los dirigentes de la UE para imponer el impuesto a instituciones financieras pero, hay divergencias sobre su aplicación y el destino del dinero recaudado.
Además propondrán que la medida sea impulsada a nivel global con el objetivo de que las entidades europeas no entren en desventaja respecto a la de otras naciones, lo cual se debatirá en la próxima reunión de líderes del G20, que tendrá lugar en Toronto (Canadá) los días 26 y 27 de junio.
Sin embargo, la unanimidad de la posición Europea no está garantizada y podría ser objeto de una formulación distinta en el documento que finalmente sea respaldado por los líderes europeos la semana próxima.
“El Consejo Europeo está de acuerdo en que habría que introducir una tasa a las instituciones financieras para garantizar que contribuyen al coste de las crisis ” , dice el actual proyecto de conclusiones.
El documento agrega que: “Las acciones que están siendo emprendidas para reforzar la competitividad, consolidar las finanzas públicas y reformar el sector financiero nos permitirán acudir con una posición fuerte para pedir acciones similares a nivel internacional en la próxima cumbre del G20 ”.
La Comisión Europea defiende la creación de un fondo por cada país de la UE que financie las eventuales reestructuraciones de bancos con problemas económicos, mientras que Francia y Alemania apuestan por emplear este impuesto en alimentar los presupuestos nacionales.
En el seno del G20, la tasa es apoyada por Estados Unidos y Europa, mientras que es rechazada por Canadá, Australia y los países emergentes, por considerar que podría ahogar el crédito.
El gravamen fue uno de los asuntos que centraron la reciente reunión de ministros de Finanzas del G20 en Busán (Corea del Sur), pero finalmente no fue mencionado en el comunicado final, que se limitó a indicar que “ el sector financiero debe hacer una contribución justa y sustancial dirigida al pago de la carga asociada a las intervenciones de los gobiernos ” .
El proyecto de conclusiones de la cumbre de líderes de la UE insiste en la determinación europea de acelerar la consolidación fiscal de los estados miembros y el compromiso de cumplir los acuerdos del G20 para endurecer la regulación financiera y garantizar la estabilidad económica mundial.