Los hoteles en Costa Rica reducen al mínimo sus operaciones en setiembre y octubre, los dos meses de menor ocupación del año, lo cual implica salida temporal de empleados o traslado de trabajadores a mantenimiento.
Un sondeo de La Nación entre algunos hoteles y cámaras del sector reveló que este año la situación es todavía más difícil, pues se calcula que la ocupación promedio caerá al 35%, y a menos del 30% en muchos casos.
Flora Ayub, directora ejecutiva de la Cámara Costarricense de Hoteles (CCH), dijo que el porcentaje de ocupación viene cayendo desde hace unos tres años.
“Algunos hoteles nos dicen que tienen previsto un 30% o 40% de ocupación para setiembre y octubre, con proyecciones hasta menores de un 30%”. agregó.
Modalidad. La dirigente reconoció que muchos hoteles contratan personal bajo la modalidad de “trabajadores eventuales”. Eso significa que laborarán solo un periodo determinado, el cual termina precisamente a finales de agosto, al iniciar el periodo más bajo del año para el sector.
Isabel Vargas, presidenta de la Cámara Nacional de Turismo (Canatur), recordó que en el 2011 la ocupación promedio en setiembre y octubre cerró en 42,2%, lo cual bajó a un 35,8% el año pasado y se espera que sea menor este año.
Vargas resaltó que muy pocos negocios cierran totalmente pues Costa Rica aún capta turistas de algunos nichos específicos, aunque la situación sí provoca que algunos hoteles se paralicen por un tiempo.
Tal es el caso de hotel Pacífico Luna, en Manuel Antonio, de 12 habitaciones, que debió cerrar a la espera de reiniciar actividades en diciembre.
Generalizado. Leovigildo Villegas, presidente de la Cámara de Turismo de la Zona Norte (Catuzón), reconoció que los empresarios mandan a los empleados a la casa, aunque dijo que no se manejan números. En esa zona, el hotel Arenal Kioro aprovecha para enviar personal a capacitación, da vacaciones y traslada a otros a tareas de mantenimiento, explicó Francinia Solano, del área de reservaciones.
En el Arenal Paraíso mandaron una o dos personas por departamento a vacaciones, relató Gloriana Ramírez, de Reservaciones.
Jorge Arrieta, gerente de Arenas del Mar, en Manuel Antonio, Aguirre, detalló que no despiden a nadie, pero hacen entrenamientos cruzados; es decir, gente de un departamento pasa a otros.
Agregó que también dejan el hotel como nuevo, listo para la temporada alta, a partir de diciembre.
Ricardo Guadamuz, subgerente del Blue River, en las faldas del volcán Rincón de la Vieja, reconoció que tienen contratos de personal que terminan en estas fechas. La ocupación en setiembre cayó a un 45%. Colaboraron Mario Guevara y Carlos Hernández