25/11/2011. Locuras en diferentes negocios comerciales por ventas en el viernes negro, Avenida Central. Foto Abelardo Fonseca (Abelardo Fonseca)
A pocos días de que comience el pago de los aguinaldos, los bancos refuerzan las medidas de seguridad para evitar que los delincuentes se aprovechen del mayor flujo de dinero en la calle.
Monitoreo de cajeros automáticos, vigilancia externa, estrategias de control interno y coordinación con las fuerzas policiales son algunas de las medidas que toman los bancos para resguardar a sus clientes.
No obstante, el aumento de las acciones preventivas no se traducirá necesariamente en más oficiales de seguridad: los bancos echarán mano a la tecnología y esquemas de inteligencia criminal para proteger sus intereses.
Los bancos Nacional, de Costa Rica (BCR) y Bancrédito cuentan ahora con centros de monitoreo centralizado para todas sus oficinas.
Estas son unidades de vigilancia desde donde se observan permanentemente los movimientos dentro de las sucursales.
“Antes los mecanismos de seguridad eran represivos, había policías con armas, eso no les gusta a los ticos. Ahora hay instrumentos electrónicos que refuerzan la parte física y que permiten hacer un despliegue inmediato”, comentó Fernando Naranjo, gerente del Banco Nacional.
En el BCR también contarán con patrullaje motorizado, circuito cerrado de televisión, oficiales encubiertos y mapeos de riesgo según zonas de criminalidad.
“Tenemos un análisis integral, con video, alarmas y gráficos; podemos hacer un monitoreo de riesgos permanente”, dijo Carlos Astorga, gerente de Seguridad de la entidad.
En el caso del Banco Popular, también se tendrá control de las personas que visitan las oficinas, para reprimir los intentos de “marcaje”, situación que consiste en seguir a una víctima que fue escogida desde el banco. “En esta época, debido a la mayor afluencia de clientes, reforzamos estas medidas”, dijo Raúl Lacayo, jefe de Seguridad del Popular.
“Entregamos información a nuestros clientes en
Con esta posición coincidió Astorga, del BCR. “Para que las medidas preventivas de actos delictivos sean más eficaces, es necesario que los clientes actúen con cautela y eviten exponerse a riesgos, en especial ser reservados a la hora del retiro del aguinaldo y mantener en reserva su decisión de ir al banco o a un ATM”.
Entre los cuatro bancos de capital público, el presupuesto anual de seguridad sobrepasa los ¢5.000 millones.
El gasto en seguridad incluye oficiales, auditorías, videovigilancia, GPS en vehículos de transporte de valores, control de acceso a edificios, blindaje, análisis e inteligencia criminal.