Washington. Igual que sucedió hace ya cuatro años , el primer paso hacia el venidero Mundial se llenó de caras nuevas, precisamente uno de los objetivos claves en este recién iniciado proceso.
Al tardío debut de Johan Condega con la Mayor se le unió ayer el primer paso de David Ramírez por la Sele , los dos titulares en un combinado que también vivió el estreno de Johan Venegas y más tarde el de Juan Bustos Golobio.
Fueron cuatro nombres que se suman a la base que dejó toda la aventura hacia Brasil 2014 y que ahora lucharán por mantenerse vigentes en otros cuatro años que, presumiblemente, tendrán una base más que establecida.
Por eso es que más allá de la cómoda victoria 3-0 ante Nicaragua, el arranque en esta Copa Centroamericana dejó ver lo que debería ser el credo para los años por venir: un equipo que respeta la más que probada estructura de la que ya goza pero que mantiene abiertas las puertas al ensayo y la oportunidad, valiosos recursos cuando se mira a futuro.
Receta probada. La derrota 3-2 ante Argentina en 2010 supuso el primer partido en el camino hacia la cita brasileña y sucedió en un partido con similitudes al de ayer: el estreno de un emergente en el banquillo (Rónald González) y una camada de debutantes que desde el día uno apuntaron hacia el 2014.
Ahí fueron nueve los estrenos en la Mayor, entre ellos por ejemplo Bryan Oviedo, Christian Gamboa o el mismo Marcos Ureña, los tres en los planes del pasado Mundial.
“Siempre había imaginado ese sentimiento inigualable del honor de vestir la camiseta de todos, pero con una dosis extra por hacerlo de titular. Mi camiseta nunca, nunca saldrá seca”, escribió David Ramírez en su cuenta de Twitter .
Venegas, quien además adornó su estreno con un gol, se mostró agradecido con ambas cosas y con la confianza por meterse en un equipo que sabe está muy armado.
“Solo puedo agradecer por todo, por la confianza y porque creo que fue un buen debut, gracias a Dios pude anotar y colaborar con el equipo para poder sacar un buen resultado”, finalizó Venegas.