Redacción
El clásico centroamericano le dará la bienvenida a Costa Rica a una nueva Copa Oro, el certamen que más desiluciones le ha provocado al país en su historia. La Sele ha vivido enormes alegrías en los mundiales, pero en el torneo del área todavía no sabe lo que es levantar el trofeo. Esta vez, el sueño se asoma con sigilo.
Costa Rica debuta este viernes frente a Honduras con dos circunstancias que incrementan la esperanza: El timonel Óscar Ramírez convocó a su equipo 'A' y, los siempre favoritos, México y EE.UU., llegan muy disminuidos.
El 'Tri' únicamente llevará a Copa Oro el 13% de su base de jugadores, un caso similar al de los estadounidenses, que convocaron solo al 22% de sus hombres importantes. Es ahí donde la Nacional parece llevar ventaja, pues Machillo incluyó en la lista lista al 83% de su nómina más importante.
También está la otra cara de la moneda. El plantel viene de dos juegos eliminatorios en los que dejó serias dudas en su rendimiento. Aún cuando derrotó 2 por 1 a Trinidad y Tobago e igualó frente a Panamá (0-0), el plantel estuvo lejos del desempeño mostrado en los otros compromisos de la ruta mundialista.
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El propio capitán, Bryan Ruiz, hizo énfasis en la necesidad de recuperar la claridad con el balón y el equilibrio, factores muy necesarios para la recta final de la eliminatoria, en setiembre próximo.
Pero, ¿qué puede mostrar Costa Rica distinto en su debut ante la selección catracha, y cuál es la expectativa en cada una de las zonas del campo?
Al parecer, las exigencias de innovar y sobre todo sorprender, llevarán a la Sele a variar su libreto en distintas ocasiones durante la Copa. En la faceta táctica, Ruiz reveló que Machillo ha probado con dos delanteros natos, en lugar de utilizar un punta con cinco hombres en el mediocampo.
La otra disyuntiva se presenta en la zona baja, pues el esquema predominante es con tres hombres en el fondo y dos carrileros, aunque en las prácticas también ha salido a relucir la línea de cuatro.
Puesto por puesto. En la portería, Machillo reconoció que el arquero Patrick Pemberton lleva la ventaja, pero podrían darse rotaciones en los otros juegos. Danny Carvajal y Leonel Moreira esperan su oportunidad, aunque es probable que el seleccionador se incline por el arquero manudo para el primer enfrentamiento.
En la retaguardia sobra la experiencia. Además de Giancarlo González, Johnny Acosta y Michael Umaña se abre un campo para Francisco Calvo, titular indiscutible en el Minesota United de la MLS y de buen desempeño.
La ausencia de Waston le favorece al central de perfil izquierdo, quien podría ser de la partida.
En la izquierda, Bryan Oviedo tiene todos los puntos ganados para debutar como titular, después de que se confirmó la lesión del carrilero, Rónald Matarrita, y por la derecha está Cristian Gamboa (como siempre).
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Aunque es prácticamente la misma columna vertebral de la eliminatoria, Machillo avisó que hará cambios marcados en todos los juegos. El torneo se presenta como un chance de oro para Kenner Gutiérrez y Juan Pablo Vargas, constantes en los microciclos de Ramírez, pero que no han tenido minutos en la ruta mundialista.
En el mediocampo, el estratega tendrá que buscarle un sustituto a un indiscutible: Celso Borges. La ausencia del volante del Deportivo La Coruña de España le permitirá probar a una nueva dupla en la zona de creación y recuperación. Habitualmente, Celso juega acompañado por Rándall Azofeifa o incluso solo en la medular.
David Guzmán espera con ansias la opción de ser titular. Después de convertirse en el primer cambio de la Mayor en los últimos tres juegos de la eliminatoria, esta vez tiene todas las fichas ganadas para ser de la partida.
Podría repartirse las funciones con Azofeifa o dedicarse más a la marca para incluir a un volante mixto. Ramírez ha hecho énfasis en que quiere probar con el grupo 'A' al volante Ulises Segura, quien jugó la última Uncaf.
También se encuentra en lista de espera Rodney Wallace, que debutó con la Nacional en la eliminatoria durante el cotejo ante Trinidad y Tobago. Siempre con el complemento de Bryan Ruiz, la bujía del mediocampo al menos en los juegos claves, pues el propio jugador admitió que el cuerpo técnico lo quiere regular.
Las opciones en esta zona son amplias, pero evidentemente es donde el equipo lleva con más bajas claves. Además de Borges, no estará en el torneo el mediocampista Christian Bolaños.
De acuerdo al esquema que decida utilizar Ramírez, la Nacional podría jugar con uno o dos puntas. Después de muchos entrenamientos, microciclos y llamados sin protagonismo, la Copa Oro se presenta como la vitrina para el único delantero goleador de la Selección: Ariel Rodríguez.
El atacante del Bangkok Glass se perdió la última Copa América Centenario por una lesión, pero en esta ocasión haría valer el esfuerzo de viajar desde Tailandia en tantas ocasiones para estar en el banquillo.
Delante de él hay tres hombres con mayor recorrido en la eliminatoria: Johan Venegas, Joel Campbell y Marco Ureña, aunque está claro que con las rotaciones, el que perfore más las redes, podría ganar puntos para disputar la fase decisiva del certamen del área.
También existe incertidumbre en torno al rendimiento de David Ramírez, que jugó la última temporada en el Moreirense de Portugal, pero aún no se garantiza cuál será su destino en la campaña venidera.
Ramírez mostró buenos argumentos durante su estancia en la Mayor al mando de Paulo Wanchope, pero desde que Machillo comanda el equipo, es la primera vez que tendrá opciones reales de jugar.
Es muy probable que el once elegido por Óscar Ramírez para el duelo ante la H tenga a muchos jugadores de la base, pero ante Guayana Francesa y Canadá se harán variantes muy marcadas.