Nicaragua engavetó aquellos partidos en los que se daba por descontado que su adversario no tendría piedad y lo aplastaría sin misericordia.
El rival que se medirá con la Selección de Costa Rica esta tarde (5:30 p. m.) cambió la sumisión por la pelea y aprendió a cerrar su arco.
La Tricolor se enfrentará a la Nicaragua más respondona de los últimos años, según el rendimiento mostrado por los pinoleros.
El equipo dirigido por el costarricense Henry Duarte lleva más de dos años de no perder por una diferencia de tres o más anotaciones.
La última ocasión en que los nicas tropezaron por un marcador abultado, fue precisamente contra la Sele en la Copa Uncaf del 2014.
El cuadro patrio derrotó a los blanquiazules por 3-0, el 3 de setiembre del 2014.
A partir de aquel encuentro, transcurrieron 22 compromisos más sin palizas.
La Copa Centroamericana 2017 refleja la evolución del cuadro pinolero, cuyas dos caídas han sido por una mínima diferencia (Panamá y Honduras, ambos por 1-2).
“Ahora jugamos de igual a igual, hemos puesto en problemas a Jamaica y Trinidad; hemos jugado contra Costa Rica en Liberia y no nos pasaron por encima, ya no es aquel equipo inocente y mezquino”, respondió el técnico pinolero, Henry Duarte, sobre el cambio experimentado por la que fuera una selección inocente.
El estratega subrayó con orgullo que, e su criterio, “los mejores partidos que se han dado en la Copa son Nicaragua-Honduras y Nicaragua-Panamá. Se han generado opciones y goles”.
Viejos tiempos. Antaño, era muy frecuente que Nicaragua recibiera severos correctivos.
Los nicaragüenses no jugaron las primeras tres Uncaf (1991, 1993 y 1995) pues no pasaban de una ronda previa. En una de esas eliminatorias, Costa Rica les ganó por un lapidario global de 8-0 , en 1993.
Cuando debutó en un torneo regional, en 1997, perdió sus dos partidos, uno de ellos a manos de la Tricolor (5-1).
En aquella oportunidad, encajó 11 goles, en dos veces que saltó al campo.
Desde el 2003 y hasta el 2007 siempre ganó, al menos un juego, pero después dejó de hacerlo las cuatro ediciones siguientes. Eso sí, mejoró la seguridad en su puerta porque, en promedio, recibió cinco goles en esos certámenes.
Para el arquero nacional Danny Carvajal, el oponente de hoy no puede ser visto por debajo del hombro.
“Nicaragua ha mejorado muchísimo y en la Uncaf se ha visto bien. Ante Honduras, hizo un juego aceptable, incluso le empezó ganando. A Panamá lo complicó durante todo el partido. Además, en la parte táctica se para muy bien y tiene buenos jugadores”, expresó Carvajal.
Para la Sele, ganar hoy será fundamental, ya que cada victoria la acerca a la posibilidad de ceñirse una nueva corona.
Otro resultado sería inadmisible e histórico.