Ayer comenzaron los combates en el Campeonato Centroamericano de Esgrima, en las categorías de infantil, cadete y juvenil.
En esta competencia internacional, que durará toda la semana, hasta el 20 de julio, los primeros en verse las caras han sido los más jóvenes, las categorías femenina y masculina sub-12.
La esgrima, a pesar de ser un deporte poco conocido por el gran público, vive en Costa Rica sus años dorados. En los últimos tres años, el número de practicantes de este deporte se ha multiplicado.
“Pasamos de tener dos clubes en el país a tener ahora seis trabajando. Pasamos de tener competencias de 10 personas a competencias nacionales de casi 40 participantes en todas las categorías. Ha sido un gran logro”, aseguró Alberto Cruz, director técnico del torneo.
Dentro de este deporte hay tres modalidades: sable, espada y florete. Este último es el arma básica que se enseña a todos los esgrimistas, también llamados tiradores.
En cada combate de esgrima, se enfrentan dos contrincantes que deben intentar tocarse con un arma sin filo ni punta.
Cada vez que un tirador es tocado (
La celebración de este campeonato es una oportunidad única de acercar este deporte al público. “Ofrece la opción de que la gente vea otros deportes y aprenda que hay alternativas tanto para niños como para adultos”, dijo Carlos Godoy, entrenador de Costa Rica.
Por su parte, los jóvenes esgrimistas valoran otras cosas. “Te da la oportunidad de conocer diferentes países”, contó María Ubau, tiradora de 11 años de la delegación nicaraguense.
Precisamente ha sido Nicaragua la que ha tenido más problemas para acudir a a la cita. Los países participantes son Costa Rica, Panamá, El Salvador, Guatemala y Nicaragua. Por motivos políticos, a estos últimos se les exige visa.
Los esfuerzos de la delegación organizadora y de la nicaraguense por conseguir la exención no dieron sus frutos. “El deporte une pueblos, no debería ser que, por problemas de gobierno, los deportistas tengamos que asumir las consecuencias”, añadió William Calderón, técnico de Nicaragua.
“El equipo que se necesita para la práctica no es tan caro y además todos los clubes lo prestan para poder practicar y competir”, afirmó el director técnico.
Si se pretende llegar a nivel internacional, sí es necesario desembolsar más dinero. “El equipo que exige la Federación Internacional tiene unas exigencias mínimas que salen más caras” añadió.