Un histórico Pujols le da la ventaja a los Cardenales

Arlington, Texas. Albert Pujols habló alto y claro ... y con su bate,

Dentro de una explosión de bateo, Pujols sacudió tres enormes jonrones que produjeron seis carreras y los Cardenales de San Luis se impusieron 16-7 a los Rangers de Texas anoche para tomar una ventaja de 2-1 en la Serie Mundial.

El sensacional toletero dominicano Pujols inscribió su nombre en un grupo selecto al convertirse en apenas el tercer jugador con tres jonrones en un juego del Clásico de Otoño: Babe Ruth (1926, 1928) y Reggie Jackson (1977) son los otros, ambos con los Yanquis.

Los tres jonrones fueron ante rectas. Cada uno desapareció por el jardín izquierdo. Todos fueron con signos de exclamación.

¿Qué los bates habían sido silenciados en esta serie?

En el tercer juego, sin embargo, rugieron con todo. Luego de anotar ocho carreras entre ambos en los dos primeros desafíos, los Cardenales y Rangers igualaron esa cosecha en solamente cuatro entradas. El duelo terminó con una catarata de 23 carreras y 28 hits.

Y nadie estuvo más explosivo que el dominicano Pujols, por lejos con la mejor producción individual de su trayectoria en las tres Series Mundiales en las que ha estado.

Su palo de tres carreras ante Alexi Ogando en el sexto episodio fue descomunal, al viajar 423 pies por el jardín izquierdo. Luego que Texas se había acercado 8-6, el batazo del inicialista fue lo que hizo que los Cardenales se despegaran.

Pujols aún tenía para más. Un inning después, la desapareció con un compañero en circulación ante Mike González.

Y completó la faena en el noveno frente a Darren Oliver, aunque esta vez sin nadie en circulación.

Reivindicación. Pujols se había ido en blanco en los seis turnos que había tomado en la serie, con un patrón negativo con promedio de .222 (ocho hits en 36 turnos) con un jonrón y dos remolcadas al combinar sus dos previas en 2004 y 2006.

También llegó asediado por críticas, luego de que en el segundo juego no formuló declaraciones a la prensa. Pujols, quien cometió un error clave que facilitó una remontada de los Rangers para salir victoriosos 2-1, adujo que se marchó porque nadie pidió hablar con él.

Pero ayer, con un día de descanso de por medio, Pujols habló con el lenguaje de los hits.

Luego que los dos primeros juegos los dominaron los lanzadores, el cambio de clima –del frío de San Luis al calor de Texas –obviamente incidió en el estallido ofensivo.

Ninguno de los abridores –Kyle Lohse de los Cardenales y Matt Harrison de los Rangers– pudieron lanzar más allá del cuarto inning.

Treinta y seis de los 54 equipos que han ganado el tercer juego para irse arriba 2-1 han terminado consagrándose campeones, incluyendo 10 de los últimos 11.