Blas Martínez, gran luminaria del baloncesto nacional el siglo pasado, se recupera de la operación a la que fue sometido para reparar el rompimiento del tendón de aquiles de su pierna izquierda.
El exbasquetbolista y entrenador fue operado por el médico especialista Jaime Ulloa y ahora le esperan dos meses enyesado, más cinco o siete meses de recuperación.
Sin embargo, el pronóstico es alentador, dijo Ulloa.
“El 80% de las personas que pasan por este tipo de operación quedan en perfectas condiciones. El otro 20% no vuelve al mismo nivel de movilidad, pero es muy probable qua a Blas le vaya bien”, comentó ayer Ulloa.
Igual optimismo comparte Martínez, quien dijo que lo más incomodo serán los dos meses que durará con el yeso puesto.
El médico ya conoce de sobra a Blas, pues fue quien lo operó cuando tuvo problemas de ligamentos en ambas rodillas, hacia finales de su carrera deportiva.
Blas, de 54 años de edad, se lesionó en un partido de baloncesto en la categoría Maxi 45, jugando con el equipo de los Ángeles, frente al Tennis Club.
Ilustre del baloncesto. Martínez es una de las grandes leyendas de la Primera División del baloncesto costarricense.
Él inició su trayectoria con el equipo del Colegio Los Ángeles, en el año de 1976.
En los 24 años que duró su carera cosechó cetros en casi todos los quintetos que integró, y se trata de una lista larga de equipos: San Ramón, Liceo de Costa Rica, Seminario, UCA-Mucap, UIA, Universidad Fidelitas y, finalmente, Grecia.
Con Grecia ganó un título nacional y dos torneos de copa en tres años. Allí seguía activo cuando una jugada del destino, el 10 de octubre del 2000, le provocó una lesión en su rodilla derecha.
Ulloa también lo operó aquella vez, pero el jugador, de 42 años en aquel entonces, no volvería a jugar profesionalmente.
Después, volvió como entrenador a la Primera, con un corto paso al frente del Deportivo Saprissa.
Según contó ayer, actualmente se mantiene muy alejado del baloncesto y no está dirigiendo.