Antes del Mundial el principal temor de jugadores, técnicos y aficionados era el desempeño del balón Jabulani , pero este no se convirtió en protagonista negativo, sino más bien los errores de los porteros, que han sido la principal falla.
El juego entre Uruguay y Corea del Sur no fue la excepción, tanto el primer gol de los charrúas como el del empate coreano se dieron gracias a la mala técnica de los porteros, quienes no pudieron despejar centros que parecían fáciles.
En la primera anotación de Luis Suárez, el balón pasa en frente del arquero asiático Jung Sung-ryong, quien solo atinó a verlo pasar cuando lo podía despejar. El uruguayo, solo dentro del área pequeña, logró capitalizar el error con el 1-0.
El empate de Corea llegaría de la misma forma, un centro fue desviado por la defensa, pero cuando quedó cerca de Fernando Muslera, Lee Chung Yong cabecéo fácil ante la salida a destiempo del charrúa.
El arquero del Lazio de Italia reconoció su culpa en la anotación, y dijo que “uno la ve y por la desesperación de tratar de corregir el error, sale y no sabe lo que puede pasar”.
Esta anotación cortó la racha de imbatibilidad de Muslera en el Mundial, la cual quedó en 338 minutos y es la mejor marca de Uruguay en una Copa del Mundo.
Estos errores, los primeros en los octavos de final, se suman a los más de diez errores de porteros que se dieron en la primera ronda, que ya desde el segundo día de competición comenzó a sumar.
Robert Green de Inglaterra colocó mal sus manos ante un remate del estadounidense Clint Dempsey y el balón ingresó despacio en su marco. Esta anotación significó el definitivo empate a un gol.
Australia es la selección que más ha sufrido por los errores en su arco, ya que vieron vulnerada su meta en los juegos contra Alemania y Serbia merced a errores de su portero Mark Schwarzer.
Francia, Grecia, Argelia, Ghana, Paraguay y Chile son otros equipos que vivieron los errores de sus porteros en la primera ronda.