Excelente pitcheo de Bernal Sánchez y Alberto Cabrera preservaron la fe y la esperanza del Liceo de Costa Rica tras vencer ayer a Puntarenas 5-0 y 6-2 en el diamante porteño de El Roble.
Con esto, el equipo liceísta y su fiel mentor, Héiner Ugalde, mantienen viva la opción de escalar hacia las series eliminatorias del play-off, en las cuales se disputarán dos cupos de la serie final por el título del 2010, el cual se disputará a cuatro victorias.
Sánchez lanzó una joya en el primer partido y consiguió la pintura blanca 5-0 apoyado con la ofensiva de Alexánder Flores, Carlos Artavia y Bobby Muñoz, quienes hicieron trizas de la defensa local.
En el segundo partido, Alberto Cabrera lanzó como de costumbre y antes de la última entrada ganaba por diferencia de cinco carreras, aunque el final alcanzó el triunfo seis carreras por dos.
El Liceo pretende desalojar a los Astros del segundo y último sitio de clasificación el domingo venidero, en el Parque Antonio Escarré.
Espina. Al mismo tiempo, los Tiburones han puesto a cavilar a los bicampeones de Santo Domingo, tras doblegar ayer en el Escarré a Jacó 5-1 y 4-3, y conseguir en tal forma el boleto de los play-off.
Los Tiburones se convirtieron en obstáculo insalvable de los heredianos durante el campeonato anterior, con categórico 4-0 en la respectiva serie particular.
“Esto nos alienta para dar el campanazo del año en la eliminatoria venidera contra Santo Domingo”, comentó el timonel de los escualos, Roberto Gómez.
Dos hits y dos carreras impulsadas por Osmin Rostrán y un triple de Alfredo Jarquín fueron notas importantes en la primera victoria de los Tiburones.
En el segundo partido, un buen relevo de Pedro Muñoz y jonrón del jardinero Erick Sánchez coadyuvaron en el triunfo de la novena de los Tiburones.
Después del receso a causa de la fuerte lluvia y con los corredores del empate en los costales, Muñoz llegó al montículo para ponchar a Jairo Reyes y obligar al receptor Luis Rivera a un fácil elevado por la segunda base para el último out del partido y el triunfo de los Tiburones por la diferencia mínima, marcador de 4 a 3.