“Es la felicidad pura. Deseaba tanto obtener esta medalla”, dijo radiante el joven francés de 20 años tras su triunfo del miércoles en los 100 metros del Campeonato de Europa de atletismo de Barcelona, con 10.11 segundos.
“Fue una brillante final”, agregó el único blanco que ha podido bajar la barrera de los 10 segundos.
El pasado viernes 9 de julio, en el campeonato galo de atletismo, Lemaitre se había convertido en el primer velocista blanco en correr la distancia por debajo de los 10 segundos, imponiendo además el récord de Francia: 9.98 segundos.
Cuando Lemaitre salió del interior del estadio retocado con un sombrero vaquero para contestar a las preguntas de los reporteros, dio más la sensación de ser un muchacho juguetón que un duro héroe de película.
“La alegría de ser campeón de Europa es mucho mayor que la de correr por debajo de los 10 segundos”, dijo el estudiante de electrotécnica de Aix-les Bains, cuyo tiempo de 10.11 segundos fue el más lento de un oro europeo desde hace 16 años.
Lemaitre, quien puede lograr otras preseas doradas en 200 metros –la semifinal la ganó con facilidad en 20.64 segundos y los relevos 4x100, tiene la oportunidad de ser el atleta más exitoso de los campeonatos de Europa.
Monarca mundial júnior de 200 y europeo de 100, Lemaitre destaca entre sus rivales por sus 1,88 metros y 75 kilos, aunque con esta envergadura al lado del rey de la velocidad, el jamaicano Usain Bolt (1,96 m y 86 kilos), todavía se queda pequeño.
“Queda todavía mucho trabajo por delante. Estoy ansioso”, manifestó ayer Lemaitre.
En la final del Europeo tuvo que luchar duro por la victoria.
“Mi salida dejó qué desear, pero luego aceleré como un loco, fue difícil”, dijo Lemaitre, quien de joven probó con el futbol y el rugby.
“Tiene talento, ambición y no es nada engreído”, opinó Alain Blondel, exdecatleta francés, acerca de la nueva estrella gala, que se muestra un tanto introvertido.