Barra da Tijuca, Brasil.
Miguel Murillo se sacó la rifa en el yudo de los Juegos Olímpicos Río 2016, pues para el lunes, su bautizo en la máxima fiesta deportiva del planeta será nada más ni nada menos que ante el campeón del mundo en la categoría de -73 kilos, el japonés Ono Shohei.
“Es de Japón, del país en el que nació el yudo, pero igual yo siempre voy a dar lo mejor de mí, mi objetivo siempre ha sido ganar el primer combate y eso voy a hacer”, dijo Murillo.
Confesó que cuando supo que le tocaría abrir ante el mejor yudoca del mundo en su categoría, “sentí una gran emoción más que una decepción porque a quién no gustaría competir contra el favorito y ganarle, eso es lo que quiero hacer yo”, reseñó Murillo.
Dijo que a partir de este momento buscará videos del nipón en la Internet para estudiarlo.
“Es un yudoca muy versátil, pero todos tienen alguna falla y vamos a buscarle cuáles son”.
Agregó que al conocer el nombre de su rival, nada cambia.
“Todo sigue igual, lo que traíamos planeado, nada más que ahora hay que planear la competencia contra él”, relató Murillo.
Él competirá el próximo lunes en el Arena Carioca 2.