4/3/13. Piscinas Maria del Milagro Paris. foto: eyleen vargas (Eyleen Vargas D)
La ausencia de un salvavidas en la piscina María del Milagro París limita el uso de esta por parte de personas que desean hacer deporte.
Ello debido a que desde el 2009 el Ministerio de Salud emitió el Reglamento sobre Manejo de Piscinas, el cual obliga a que las albercas con más de 1,60 metros de profundidad tengan salvavidas.
La falta de esa persona en La Sabana fue aceptada ayer por Luis Miguel Herrero, encargado de Gestión de Obras del Instituto Costarricense del Deporte y la Recreación (Icoder), dueño de la pila.
“Sí, es correcto –que no hay salvavidas–, es lo que le decimos a todo el que ha ido a inscribirse; estamos haciendo un concurso para el salvavidas, tenemos que hacerlo –el contrato–...también se estudia tener una plaza fija”, dijo ayer.
La falta de salvavidas por parte del Icoder afecta programas como el de adultos mayores, el de escuelas y colegios, y el horario ejecutivo (10 a. m. a 2 p. m.), que es utilizado por personas que hacen ejercicio.
Se intentó conocer la versión de la directora del Icoder, Alba Quesada, acerca de este tema, mas esta no contestó a llamadas telefónicas, sino que encargó a su periodista, Marvin Hidalgo, dar la respuesta.
“Por el momento, solo selecciones nacionales acreditadas por la Federación Costarricense de Natación y grupos organizados, que aporten su propio guardavidas, pueden hacer uso de las instalaciones”, indica el escrito de Hidalgo.
En dicho correo electrónico Hidalgo añade que se está gestionando la contratación de un salvavidas “en acatamiento de las disposiciones del Ministerio de Salud”.
“La Licda. Alba Quesada, directora del Icoder, con gusto ampliará más detalles una vez que se concrete el proceso interno de contratación del personal indicado”, dijo.
Ante la tardanza del Icoder en hacer cumplir un reglamento que data de hace casi cuatro años, Herrero declinó responder.
“Esa (pregunta) tendría que hacérsela a los jerarcas de la institución”, indicó el funcionario.
Contradicción. Según Wualter Soto, presidente de la Federación Costarricense de Natación, la situación de la piscina María del Milagro París no va con la meta de instalaciones públicas deportivas.
“Estamos contradiciendo el objetivo de la instalación, que es facilitar a la población que pueda hacer deporte en beneficio de la salud, es algo que debe solucionar el Icoder”, comentó ayer el jerarca.
De acuerdo con datos de Franklin Solís, periodista del Icoder, la piscina de La Sabana se empezó a construir en 1976, en el Gobierno de Daniel Oduber, y se inauguró en febrero de 1978, bajo la gestión de Guido Sáenz, ministro de Cultura.
Se le bautizó con el nombre de la célebre ondina en 1983.