A partir de 1994 tanto Guatemala como El Salvador le dieron un giro a su visión del deporte.
Desde ese año las autoridades de ambos países destinan fuertes sumas de dinero a las federaciones y Comités Olímpicos respectivos, con tal de que estos levanten el deporte de alto rendimiento.
Mientras los chapines gastan $34,5 millones, al año, en tal rubro, los cuscatlecos $12,5 millones.
De los $34,5 millones que invierten los guatemaltecos, $24 millones van al Comité Olímpico y las federaciones deportivas.
Por su parte, de los $12,5 millones que envían los salvadoreños al deporte, $7,5 millones van al Comité Olímpico y federaciones.
Esto difiere mucho de lo que invierte Costa Rica, que a pesar de ostentar un presupuesto de $17 millones al año, solo $900.000 van al Comité Olímpico Nacional (CON) y las federaciones.
Tal diferencia entre lo que se hace en suelo chapín y salvadoreño, y lo que practica el país, ya comenzó a notarse en las competencias, pues en los recientes Juegos Centroamericanos y del Caribe Guatemala y El Salvador sumaron 14 y ocho oros, respectivamente, y Costa Rica solo uno.
“En Guatemala tenemos la Confederación Deportiva, que se encarga del deporte federado, el CON, el Ministerio de Cultura y Deporte, que ejecuta el deporte recreativo, y la Dirección de Educación Física, que trabaja con el deporte escolar”, expresó Gabriela Barrios, experiodista deportiva del diario La Prensa Libre .
“La clave del éxito está en que, finalmente, se tomó en serio el deporte escolar, y lo que vemos hoy es fruto de lo que se inició hace mucho”, dijo la reportera chapina, quien estuvo en las Olimpiadas de Sidney 2000 y Atenas 2004.
Barrios, quien estuvo en deportes nueves años, y hoy trabaja para la Organización de Naciones Unidas, considera que la medalla de más valor es la que obtuvo José Amado García en la maratón, prueba en la que derrotó a los aztecas.
“Vamos por buen camino, pero creo que en el próximo ciclo olímpico vamos a estar mejor, a la plata que invierte el Estado tenemos que añadir la de empresas privadas”.
Al consultarle a Guiselle Goyenaga, ministra de Deportes del gobierno de Laura Chinchilla, por qué de $17 millones solo $900.000 van a los atletas, esta contestó que con los $16,1 millones restantes se pagan Juegos Nacionales, la planilla del Instituto Costarricense del Deporte y la Recreación (Icoder) y un fondo destinado para los imprevistos. Otro rubro son las becas deportivas, mas este es de solo ¢66 millones para 90 atletas.