Belo Horizonte. AFP. El invicto Brasil, con su fútbol ofensivo liderado por el inspirado Neymar, tendrá una prueba de fuego hoy ante el duro Uruguay por las semifinales de la Copa Confederaciones 2013.
El renovado estadio Mineirao de Belo Horizonte (sureste) será sede del encuentro que ya despertó a los fantasmas del Maracanazo.
Brasil y Uruguay se han enfrentado 70 veces, con 32 triunfos del once auriverde, 19 empates e igual cantidad de victorias de la celeste, entre ellas la más famosa de todas, el partido final del Mundial de 1950 que Uruguay ganó de atrás a Brasil por 2-1 y quedó inmortalizado.
Pero 63 años han pasado desde entonces y mucha, demasiada agua ha pasado bajo el puente.
“Ni yo había nacido” cuando el Maracanazo, dijo el entrenador Luiz Felipe Scolari, a pesar de que nació el 9 de noviembre de 1948.
Hoy Brasil llega al choque contra su vecino a paso arrollador, tras ganar con puntaje perfecto el Grupo A con victorias sobre Japón (3-0), México (2-0) e Italia (4-2).
Uruguay, por su parte, fue escolta de España en el Grupo B, tras caer en el debut con el campeón del mundo por 2-1, vencer por el mismo marcador a Nigeria y golear al débil Tahití por 8-0.
A pesar de las diferencias vistas entre ambos equipos hasta el momento, el arquero brasileño Julio César advierte que el clásico de hoy “es peor que un Brasil-Argentina” y “no hay un favorito”.
Julio César fue clave en los últimos dos partidos entre auriverdes y celestes, en las eliminatorias para Sudáfrica 2010, que Brasil ganó en Sao Paulo por 2-1 y en Montevideo por 4-0 (única victoria brasileña en el estadio Centenario).
Scolari ya había advertido del peligro de enfrentar a la celeste. “Uruguay está muy bien armado”.
“Scolari es muy generoso”, respondió el Maestro Tabárez.
Este dijo que “Brasil es un gran equipo, que juega en su casa” y “nosotros vamos a tratar de limitar los puntos fuertes que tiene”.
Tabárez podría salir con su temible tridente de Diego Forlán, Luis Suárez y Edinson Cavani.
El partido se disputará hoy, a la 1 p. m., hora de Costa Rica.