Río de Janeiro (AFP). Ronaldinho Gaúcho, el estelar volante ofensivo del AC Milan de Italia, ganó una inyección anímica y una nueva chance de redimirse con la vuelta a la selección brasileña que afrontará este mes un amistoso contra Argentina
La vuelta del astro se da en momentos en que mejoró su desempeño en el Milan y tras la presión popular y de la prensa, que exigían su retorno desde antes del Mundial-2010.
Esta es una nueva oportunidad para que Gaúcho -electo dos veces mejor jugador del mundo- demuestre que no es apenas un 'jugador de club'.
"Es un futbolista de referencia que va dar un valor agregado a la selección brasileña, para un sector (del campo) en el que todavía precisamos evolucionar", destacó ante la prensa el técnico de la selección brasileña, Mano Menezes, al anunciar la última convocatoria.
Al final de octubre Menezes, citó 23 jugadores que afrontarán el clásico ante el archirrival Argentina, el 17 de noviembre en Doha (Qatar), y el ex FC Barcelona y PSG francés fue una de las sorpresas.
El entusiasmo volvió a ganar a Ronaldinho, que el lunes expresó algarabía en su blog personal: "como diría un gran amigo y compadre: Maraviiiillaaa!!!".
"Estoy más que feliz con la vuelta a la Seleção. Solo de pensar en vestir la 'amarelinha' otra vez ya me siento más feliz. Sin contar que jugar contra Argentina es siempre especial", afirmó el campeón del mundo en 2002.
Su última convocatoria a la 'Seleçao' fue en marzo de 2009 y su último partido el 1º de abril, en la victoria 3-0 ante Perú, por las eliminatorias sudamericanas al Mundial-2010.
Sin embargo, en su vuelta Ronaldinho no tiene en manos un 'cheque en blanco' y tendrá que demostrar su valor en el terreno: "le vamos a exigir porque tiene para dar, es un jugador de referencia, un jugador de calidad por encima del promedio", sostuvo Menezes.
Este regreso coincide con un proceso de renovación de la 'Seleçao' que Menezes inició luego de la traumática eliminación en cuartos de final del Mundial de Sudáfrica-2010 a manos de Holanda.
La labor auriverde en Sudáfrica y la gestión del polémco técnico Dunga fueron muy criticadas por la prensa y la afición, por lo cual el timonel debió dejar su cargo y fue reemplazado en agosto pasado por Mano Menezes.
Dunga mantuvo en sus inicios a Ronaldinho pero progresivamente fue relegándolo hasta dejarlo en el ostracismo. No lo convocó para el tramo final de las eliminatorias y lo dejó afuera del plantel mundialista, aún cuando estaba incripto en una nómina de suplentes a los que se podría haber recurrido en caso de lesiones.
Gaúcho había desplegado con la 'Seleçao' en 2002 su vistoso fútbol y ayudo a ganar el título Mundial en la cita de Corea del Sur y Japón. Luego tuvo en Alemania-2006 una pobre y criticada gestión junto a un plantel plagado de estrellas que, dirigido por Carlos Parreira, llegó como firme favorito y sucumbió en cuartos de final.
Ronaldinho sufrió una lesión muscular que le dejó fuera en algunos de los últimos juegos del AC Milan, ante Nápoli (2-1) y Juventus (1-2), aunque se espera que la motivación por defender otra vez la 'canarinha' eleve su nivel ante Argentina.
Gaúcho podrá poner en práctica su técnica y sus 'diabluras' junto a un jugador de similar habilidad, la joven esperanza Neymar (18), estrella del Santos, que había quedado al margen de los amistosos contra Irán (3-0, en Abu Dabi) y Ucrania (2-0, en Derby, Inglaterra), tras diversos problemas disciplinarios en su club.
De él mismo dependerá poder volver a recibir la histórica casaca '10' que honró el máximo ídolo 'Rey Pelé' y que en 2010 fue asignada al alicaído Kaká (Real Madrid).