El portero del Sevilla, Antonio Alberto Bastos 'Beto', se convirtió en figura en el título de la Europa League tras vencer al Benfica en los penales.
"Fue la final soñada. La verdad que acabó de la mejor manera posible. Es un orgullo muy grande ser portero de este equipo. Seguro que mi padre estará muy orgulloso de mí", dijo entre lágrimas el meta luso, en declaraciones al medio de comunicación español Cuatro.
El portero, quien dedicó el triunfo a sus padres y a su hijo, destacó que los cuatro porteros del Sevilla estaban bajo los palos en los lanzamientos.
Beto reconoció que el equipo afrontó agotado el tramo final. "Deseábamos terminar porque las piernas ya no aguantaban más", indicó.
Por su parte, su compatriota Daniel Carrico, apuntó que el equipo había sufrido durante el juego.
Además, el francés Kevin Gameiro, quien anotó el penal que rubricó la conquista del título, dijo no haber pensado en nada desde los once metros.
"No he pensado en nada. Solo en disparar fuerte. Es un día muy importante para el club y para nosotros", concluyó sobre el césped.