Un gol de Víctor Guzmán sobre la hora dejó tendido al Monterrey en su casa y ante su afición. Cuando parecía que la final del fútbol mexicano se iba a tiempo extra, Pachuca se adueñó del cetro.
Guzmán dejó atrás a un defensa de los regiomontanos, cabeceó solo y mandó la pelota al fondo del marco de Jonathan Orozco, al minuto 93, dejando a los locales sin nada que hacer.
En el partido Monterrey fue muy superior en los 93 minutos de juego, con opciones en el marco de Óscar Conejo Pérez, quien fue la gran figura de los Tuzos.
Pachuca tuvo que jugar los últimos 20 minutos con un jugador menos, por la expulsión de Aquivaldo Mosquera y esto no impidió que este equipo generara su único tiro a marco en el juego, un solo remate que le vale el título, un solo remate que dejó llorando a todos los aficionados rivales.
La primera etapa solo tuvo una cara, la de Monterrey, que contó con todas las alternativas necesarias para poder salir con un 3-0 a la mitad, pero Edwin Cardona falló un penal y el Conejo Pérez tapó todo, excepto el remate de Dorlan Pabón a los 39 minuntos.
Ese gol de Pabón ponía la serie 1-1, debido al triunfo de Pachuca 1-0 en la ida, y con 45 minutos por delante, parecía tiempo suficiente para que Monterrey alcanzara el cetro, pero a la postre no lo logró el equipo de Antonio Mohamed.