El portero Manuel Neuer y el mediocampista Lionel Messi tuvieron un gran 2014.
El primero ganó tres torneos; el segundo hizo 58 goles. De ahí que sean los otros dos finalistas para el Balón de Oro de la FIFA de este año.
El alemán levantó el título de la Bundesliga de ese país, así como la Copa; sin embargo, su mayor logro y, quizás sea lo que lo tiene metido en la contienda, es salir campeón del Mundial Brasil 2014, adonde fue también el mejor portero de la competición.
En todo el año disputó 62 partidos y recibió solamente 42 anotaciones, para un excelente promedio de 0,68 por compromiso.
Además, acrecentó su fama de “guardameta-líbero” con sus constantes salidas alocadas del área que, si bien son arriesgadas, emocionan al público.
Por su parte, pudo parecer que el argentino tuvo hasta hace unas semanas un pésimo curso; no obstante, las estadísticas señalan todo lo contrario.
Sí, colectivamente no ganó nada e incluso perdió la oportunidad de meterse entre los grandes que alzaron la Copa del Mundo, pero su pólvora no se apaga. Sacudió las redes en 58 ocasiones.
Lo que sucede es que muchas veces siempre se le compara con el estratosférico 2012, cuando conquistó 91 goles.
El problema de ellos que el portugués Cristiano Ronaldo los supera en ambos apartados.