Manchester United sufrió para lograr el pase a los cuartos de final de la FA Cup

Y es que los de Louis van Gaal parecieron empeñados en revivir, por momentos, la pesadilla que sufrieron en el arranque de la temporada, cuando cayeron eliminados de la Copa de la Liga, tras caer por un 4-0 ante otro equipo de la League One, el Milton Keynes Dons.

Máxime cuando los locales lograron adelantarse en el marcador a los dos minutos de la reanudación con un gol de Scott Laird, quien batió de disparo cruzado a un David De Gea, que pudo hacer algo más por evitar el tanto.

Un gol que castigó el estéril dominio del Manchester United, que pese a monopolizar el balón, no logró disparar entre los tres palos hasta los 58 minutos de juego, en un remate lejano del Ángel Di María que atajó con facilidad el meta local Thorsten Stuckmann.

Circunstancia que obligó a reaccionar de inmediato al preparador holandés, quien sustituyó a un gris Radamel Falcao por Ashley Young, quien aportó la verticalidad de la que había carecido el juego del United hasta entonces.

De hecho, una acción de Young propició a los 65 minutos el tanto del empate de los Diablos Rojos, obra del centrocampista español Ander Herrero.

Igualada que pareció agudizar la voracidad del United, que siete minutos más tarde, en el 72', dio definitivamente la vuelta al marcador con un gol (1-2) del centrocampista belga Marouane Fellaini, tras una buena internada por la banda derecha del ecuatoriano Antonio Valencia.

El delantero Wayne Rooney se encargó de transformar a los 88 minutos de juego, un penalti que él mismo se encargó de provocar.

Victoria que sitúa al Manchester United en los cuartos de final de la Copa de Inglaterra en las que los de Van Gaal se medirán con el Arsenal.