Barcelona. (AFP). “Tengo mucha ilusión”, dijo el mexicano Javier Vasco Aguirre al ser presentado hoy como nuevo entrenador del Espanyol y añadió que “espero poder contagiar” ésta al vestuario del equipo que lucha en las últimas posiciones para no caer a la Segunda División.
"Quisiera pasar página y empezar una nueva etapa", empezó diciendo Aguirre después de admitir que había visto el partido de la víspera en el que los blanquiazules perdieron ante Sevilla en el partido de vuelta de los dieciseisavos de la Copa del Rey de la que quedaron eliminados (3-0).
"Tengo muchísima ilusión y me gustaría contagiarla a la gente" de este club, al que Aguirre ponderó por su historia y por las instalaciones con las que cuenta actualmente.
El presidente del Club, Joan Collet, dijo que le habían propuesto muchos entrenadores pero que "a medida que pasan las horas, estoy más convencido de la decisión" adoptada al fichar a Aguirre.
En el equipo que dejó el argentino Mauricio Pochettino, cesado el lunes después de cuatro años en el banquillo, "hay una base muy sólida" desde hace tiempo y "tiene una cantera que envidiamos" muchos, dijo el técnico mexicano.
"Quisiera pasar página, empezar de cero e ir todos a una. Los resultados van fortaleciendo el ánimo. Por eso es muy importante el partido ante el Granada", el domingo en la 14ª jornada de la Liga española.
El Granada ocupa actualmente la 18ª posición de la clasificación, la primera del descenso, con 11 puntos, mientras que el Espanyol es colista, con solo 9 unidades.
Respondiendo a todas las preguntas que siempre fueron precedidas por un "bienvenido míster", el "Vasco" dijo que "yo sólo quiero sumar" y al referirse a sus dos ayudantes, Juan Iribarren y Alfredo Tena, destacó su profesionalidad y "lealtad".
Aguirre tuvo un papel destacado en la selección de su país, y en la Liga española ya dirigió los equipos de Osasuna, Atlético de Madrid y Zaragoza.
Nacido en México en 1958, Aguirre jugó en los años ochenta en Club América, Los Angeles Aztecs, en Atlante, hasta que vino a España para militar en el Osasuna.
Aguirre tendrá una misión complicada en su nuevo desafío, ya que el Espanyol va último en la Liga española y está en un momento muy difícil, hasta el punto de que el club se deshizo de Pochettino, una figura emblemática del club y un técnico muy querido en el vestuario de los 'periquitos'.