Barcelona. AP. Las pruebas médicas realizadas ayer por el Barcelona a Lionel Messi descartaron finalmente una lesión grave del astro argentino.
Messi tuvo que salir en camilla del partido entre los catalanes y el Benfica por la fase de grupos de la Liga de Campeones.
“El jugador tiene una contusión ósea en la cara externa de la rodilla izquierda. La evolución clínica es la que marcará su disponibilidad para el próximo juego”, según el último comunicado médico del club azulgrana,
Así, el rosarino podría estar a disposición del técnico Tito Vilanova para disputar la jornada 15 de la Liga, cuando visiten el domingo la cancha del Betis (2 p. m., hora tica).
Messi se lastimó la rodilla izquierda a los 79’, cuando recibió un pase con ventaja de Gerard Piqué y encaró al arquero del Benfica, Artur, quien se le tiró encima de la pierna. A pesar del golpe, el ariete se mantuvo de pie, siguió unos metros y alcanzó a rematar al arco, aunque el guardameta ya se había parado y atajó sin problemas.
“No sé lo que puede ser, pero no es agradable ver a Messi abandonar el campo en camilla. Hay que esperar” , alcanzó a comentar el director deportivo del Barça Andoni Zubizarreta tras el partido, que calificó de “ desapacible” .
También defendió la decisión del técnico, Tito Vilanova, por dar entrada a Messi en un cotejo intrascendente para su equipo.
“Tito es quien gestiona los recursos que tenemos y pone la alineación que cree. No nos movemos por titulares de prensa. De vez en cuando da una sorpresa” , indicó.
El delantero argentino ahora tiene cuatro partidos en lo que resta del 2012 -tres por liga y uno por la Copa del Rey- para igualar y romper la marca que el alemán Gerd Mueller fijó en 1972.