Un tico será la mano derecha del técnico Jorge Luis Pinto en el crecimiento del espíritu colectivo del camerino de Honduras.
El gestor de desarrollo humano, German Retana, acompaña al timonel colombiano en su travesía por suelo catracho.
Hace dos meses, el costarricense se sumó al cuerpo técnico de la H por petición explicita del estratega cafetero.
Ellos se conocen desde hace 12 años, porque trabajaron juntos en Alajuelense.
“Siempre hemos mantenido una muy buena amistad, en la que destaca el respeto y el diálogo. Se me hace muy cómodo trabajar con él”, explicó Retana.
El profesional reconoce que Pinto es un técnico exigente, pero asegura que la relación con su equipo de trabajo es muy cordial y solidaria.
Retana no quiso entrar en detalles acerca de la conflictiva salida del estratega de Costa Rica, pero asegura que el colombiano siempre busca la excelencia.
“Creo que sin ser exigente es difícil llegar a metas altas. El profesor es estudioso, muy comprometido en su trabajo y un apasionado ganador”, contó.
Retana afirma que siempre ha tenido buena química de trabajo con el seleccionador, tanto así que el sudamericano lo quiso incorporar a la Tricolor durante la ruta hacia Brasil 2014.
Sin embargo, añadió que hubo “algunas personas” en la Federación que impidieron su llegada a la Nacional en ese momento.
Con respecto a trabajar en Honduras, pese a la rivalidad deportiva que existe con Costa Rica, el gestor de desarrollo aseguró que le desea éxito a la Sele . “Esta es una gran oportunidad para mí, y desearía que ambas selecciones asistan al Mundial”.
Mentalidad. Retana tratará de aplicar en Honduras toda la experiencia que acumuló en su paso por la Tricolor durante el proceso de Alexandre Guimaraes, hacia Corea-Japón 2002, y con Rodrigo Kenton, rumbo a Sudáfrica 2010.
Dice que, hasta el momento, ha notado mucha disposición de los futbolistas catrachos por crecer como equipo.
“Me agrada su receptividad, su actitud hacia el aprendizaje y su disposición para el tipo de ejercicios que estamos realizando”, concluyó Retana.