Fortaleza (AFP). Los jugadores de la selección española que este jueves batió a Italia por penales (7-6) en las semifinales de la Copa FIFA Confederaciones se congratularon de poder jugar la final en el legendario estadio de Maracaná, en Río, y ante Brasil.
"Va a ser un partido emocionante. Había el deseo de una final Brasil-España y es una final bonita de jugar", explicó el arquero Íker Casillas, designado mejor jugador del partido, que este jueves evitó que Italia se adelantara en el marcador en el primer tiempo.
"Jugar la final ante Brasil en Maracaná es una motivación importantísima", dijo a la prensa Juan Mata, el volante del Chelsea inglés.
El jugador entró en el minuto 79 de partido por Pedro Rodríguez y marcó uno de los penales que definieron el partido, después de que el partido y la prolongación acabaran 0-0.
"Llegamos muy mermados" físicamente, dijo al final del partido, disputado bajo un calor sofocante en el estadio Castelao de Fortaleza.
"Jugar con Maracaná, contra Brasil, es estupendo para nosotros", dijo a la prensa el técnico español Vicente del Bosque.
"Cuando la gente se acostumbra a llegar a las finales y ganarlas parece que hay que hacerlo por decreto, pero no se tiene en cuenta lo difícil que es esto", valoró el delantero Fernando Torres.
Los jugadores y el técnico español también admitieron que Italia hizo un gran partido.
"No nos ha sorprendido (Italia). Han estado muy bien, han tenido ocasiones y han hecho un partidazo", dijo Mata.
El arquero Casillas coincidió. "Italia ha estado muy bien, ha estado bien plantada y ha tenido sus ocasiones", explicó.
"El partido ha sido bueno y muy limpio, ha sido ejemplar. Al final hemos tenido la suerte que nos acompaña últimamente", explicó el técnico español Vicente del Bosque.
España jugará el domingo la final de la Copa Confederaciones ante Brasil en el estadio Maracaná de Rio de Janeiro.