Barcelona y Madrid. EFE Ganarle al Getafe y colocarse a un solo punto del Real Madrid –que mañana visita el Vicente Calderón– es el objetivo marcado por el Barcelona en la jornada 33 , algo impensable tres meses atrás, cuando parecía haber dejado media Liga en Pamplona.
Desde aquella derrota ante Osasuna (3-2), que lo dejó a diez puntos y provocó que el mismísimo Pep Guardiola hablara de la reedición del título como un imposible, el conjunto azulgrana encadenó nueve triunfos consecutivos.
En las últimas cinco jornadas redujo seis puntos la distancia con el Real Madrid y, en las dos siguientes espera robarle alguno más con un único propósito: darle la vuelta a la clasificación dentro de 15 días, en el clásico en el Camp Nou.
Para ello, primero deberá ganarle al Getafe, el equipo que rompió la imbatibilidad del Barça en la primera vuelta y que intentará volver a sorprenderle mañana, esta vez en su estadio.
Gerard Piqué y Dani Alves son duda a causa de problemas musculares, Andreu Fontàs, Eric Abidal y David Villa son baja por lesión y Cesc Fábregas por castigo.
Si finalmente Piqué y Alves no se recuperan, Guardiola deberá volver a recomponer su defensa.
En el centro del campo, Xavi e Iniesta, que descansaron en La Romareda, volverán al once, y arriba Isaac Cuenca o Cristian Tello reemplazarían a Alexis Sánchez o Pedro Rodríguez como acompañantes de Lionel Messi en punta.
Los getafenses, una vez asegurada la permanencia, están en disposición de soñar con Europa, pues están a solo un punto de la sexta plaza que ocupa el Osasuna. Tras sus victorias en casa ante Real Sociedad, Valencia y Sporting, viajan ilusionados con la sorpresa.
Ayer, en el cierre de la fecha 32, Málaga derrotó por 3-0 a Racing de Santander. Con este resultado, los andaluces se colocaron terceros y desplazaron al Valencia a la cuarta posición.