Saprissa intentará llenar su hueco en la delantera con Ricardo Costa, una incógnita con sello brasileño que desde ayer se convirtió en la apuesta morada para volver a traer el grito de gol al club.
Costa, de 30 años y procedente de la liga de Malta, se negó a hacer la prueba deportiva que tanto buscó la directiva tibaseña cuando escarbaba el mercado en busca de su nuevo centro delantero, y en su lugar, arribó al país con un contrato de un año con opción a renovar.
“Yo quería llegar con el contrato firmado, de eso se encargó mi agente”, dijo el suramericano ayer luego de las pruebas médicas, el último paso antes de viajar a Guápiles a integrarse a los trabajos de pretemporada del
Julio Sosa, el agente del jugador, aseguró a su vez que una prueba no va con un jugador con la carrera y experiencia de Costa, y que así se le hizo ver a la dirigencia saprissista.
Así, a los morados no les queda de otra más que volver a cruzar los dedos para que su nueva apuesta en ofensiva sea todo lo que las referencias y videos dicen: un matador.
Él no duda en reconocer que su apuesta no pasa por la velocidad, pero sí asegura que aprovecha su estatura en el cabeceo, y que sus raíces brasileñas lo destacan en el aspecto técnico - táctico.
Ahora viene de estar dos años en el futbol de Malta (106 en el escalafón mundial según la Federación de Historia y Estadística de la FIFA), una liga que se sabe inferior a la costarricense.
Eso sí, en su historial hay también un paso breve por el Corinthians brasileño y ocho años por Europa en equipos de Suecia, Suiza, España y Grecia. También probó suerte en Corea del Sur antes de arribar a Malta en 2010.
Además juega a su favor el pasado reciente, pues antes de firmar con los morados Alajuelense ya se había interesado por sus servicios, pero el tema económico acabó por cerrarle las puertas y abrírselas a su coterráneo Anderson Andrade.
Porque ese es un punto en el que ambas partes concordaron: Costa es caro, pero al parecer no tanto para el bolsillo morado.
“Está dentro de la planificación nuestra, de los jugadores que evaluamos este era de los más caros, pero por algo es. Es un jugador consolidado, con experiencia internacional, eso nos da confianza.
“Una contratación siempre es una apuesta, pero precisamente la experiencia que él tiene nos ayuda a minimizar el riesgo”, afirmó el jerarca morado Juan Carlos Rojas.
Mientras tanto, el brasileño asegura estar consciente de todo lo que se espera de él y aunque no pudo prometer goles, sí dijo saber cómo llegar a esos: “Trabajando”.