Aún no se pueden apagar las luces de alarma, pero ya se puede respirar. Después de lo que pareció ser una eternidad, Belén finalmente salió del fondo de la tabla. ¡Y de que manera lo hizo!
El gol que marcó anoche Bryan Vega significó tres puntos que valen mucho más que el oro mismo. Sirven para sumar 39 unidades en la tabla por el descenso y dejar atrás al Municipal de Pérez Zeledón, que se quedó con 37.
“No podemos regresar a la posición en que estábamos, vamos a luchar con todo. Hemos demostrado ser un equipo con carácter, un equipo agresivo. Hoy me voy satisfecho porque observé en la cancha un equipo jugando bien al fútbol”, comentó el entrenador Briance Camacho, quien llegó hace pocas semanas a Belén.
Así que ahora serán los Guerreros del Sur los urgidos, apretados y apenas respirando en ese cruel fondo del pozo, donde se escuchan llamados del infierno que es la Segunda División.
Mata invictos. El 26 de marzo Belén sorprendió al derrotar a Santos en su difícil cancha y acabar su invicto de local este certamen.
Anoche mataron un invicto mucho más grande, terminaron con los 28 partidos que tenía Herediano sin perder en el Rosabal.
Lo que es más, fue la primera vez que el Team se quedó sin anotar en casa en el Verano. Por cierto, muy pocos equipos visitantes lograron anotar ahí.
“Nosotros sabíamos que teníamos que venir por los tres puntos, no teníamos ninguna otra opción. Tenemos que aspirar por los tres puntos en cualquier cancha a la que vayamos, no tenemos otra opción”, comentó Kevin Arrieta, de gran labor en la mediacancha.
Una recuperación a pasos gigantescos si se toma en cuenta que en los últimos cuatro partidos ha conseguido la misma cantidad de puntos (11) que en sus primeros 13 encuentros del torneo. Por algo están a un punto de la zona de clasificación a semifinales.