San Luis de Sabanilla de Alajuela. El gol, estandarte del balompié, es actualmente la mayor preocupación entre los jugadores manudos, quienes buscan explicaciones a su mala racha en la definición.
En el plantel rojinegro existe consenso de que ese es el punto débil de la escuadra y que, de paso, las deficiencias en el ataque representan la mayor ventaja que ellos brindan al adversario.
Las fórmulas para erradicar el mal escasean pues, por más ensayos que hagan, a nadie se le puede enseñar a conseguir goles, opinan varios de los integrantes del conjunto erizo.
La enemistad con la red es circunstancial. "Uno no falla porque quiere", dice Bernal Mullins.
El gol es, en el futbol, como el aire para la vida. Ese sentido de indispensabilidad pesa en Alajuelense y todos los esfuerzos se encaminan a corregir los yerros en la concreción. Así lo expresa el cuerpo técnico encabezado por Valdeir Badú Vieira.
La opción de realizar cambios en el ataque es estudiada por el brasileño. El entrenador considera, además, que cuenta con futbolistas de una buena capacidad goleadora como el caso de Rónald Gómez, Bernal Mullins y Froylán Ledezma. El eslovaco Josep Miso podría sumarse en próximas fechas a la ofensiva.
Del plantel manudo partieron este año Juan Carlos Arguedas --su máximo anotador en la temporada pasada--, Roy Lassiter, Wáshington Hernández y Javier Astúa, jugadores con buen olfato de gol.
Los manudos miran de frente la realidad y aceptan que tienen problemas para sacudir las vallas enemigas. Víctor Badilla, jugador ofensivo, cree que al plantel le hace falta concentración al momento de definir.
El atacante Rónald Gómez aduce que la ausencia de frialdad, en el instante justo de enviar el balón a la cabaña contraria es lo que ha dado al traste con los intereses de erizos. Esta noche, contra Cartaginés, los rojinegros rendirán un nuevo examen. La historia del juego dirá ..