La impotencia de saber que tenía las condiciones para jugar pero que sus prioridades estaban fuera de la cancha, le provocó a Fabiola Sánchez los momentos más tristes de su carrera deportiva.
Con dos Mundiales menores en Sub-17 y Sub-20, ella tiene 18 años de edad y cuatro de integrar las selecciones nacionales, por lo que alejarse del futbol fue difícil.
Como muchas otras, esta defensa central el año pasado tomó la decisión de renunciar a la Tricolor para dedicarse a los estudios. “Uno sin bachillerato no es hace nada”, comentó ayer, mientras descansaba en un receso de la Selección Preolímpica.
Habló con Karla Alemán y le explicó que su tiempo no alcanzaba para cumplir con todas las obligaciones, por lo que de abril a octubre estuvo viendo a la Sele solamente por la televisión. “En esa época hubo un torneo Sub-20, los Panamericanos, el Preolímpico, y yo no estaba ahí”, recordó.
Luego de la pausa y ya con su título de bachiller, Sánchez se reintegró a la Selección. “Durante el tiempo que estuve fuera del equipo, el nivel de las jugadoras subió demasiado por todos los torneos que jugaron, entonces me costó adaptarme nuevamente, pero por el apoyo de las compañeras y de la entrenadora ahora ya puedo estar acá”, mencionó.
Futuro. Aunque ahora no hay ninguna meta más clara que pelear el boleto para clasificar a Londres 2012, Sánchez deja espacio para cuestionarse sobre su futuro.
“En el futbol femenino, el retiro llega como a los 25 años, no es como en los hombres”, dijo. Por eso planea buscar una beca deportiva que le permita cumplir su sueño de estudiar medicina.