22-julio-2012. 12:00 md. Sabana. Partido por la Supercopa entre Liga Deportiva Alajuelense y el Club Sport Herediano. Fotografas del Primer Tiempo y ambiente. Alonso Tenorio. (Alonso Tenorio)
Una vez más la pasividad de la mañana del domingo josefino se vio interrumpida por camisetas de futbol de todos los tamaños. Chiquitos, grandes, niños, niñas, ancianos... Todos en marcha al Estadio Nacional para disfrutar del futbol.
Si algo demostró esta pretemporada es que a los costarricenses les gusta el futbol, les gusta la fiesta de visitar el estadio y no requieren de competencia para verse atraídos.
La Supercopa fue un partido oficial y enfrentó a dos equipos dados a muerte; pero también fue el último gran juego previo al inicio de la temporada, este miércoles.
Adolfo Hernández, de C & H Sports Agency –parte de los organizadores–, dijo que les fue bien en la boletería. La cifra de entradas vendidas fue de 26.200 espectadores.
Estos partidos, como el clásico de la Copa Ibérica de principio de mes, han resultado muy atractivos al público por un simple motivo: tienen una imagen más de familia que los partidos del campeonato.
Sí, ayer estuvieron presentes las barras bravas de ambos equipos, la 12 y la Garra , pero confinadas cada una a un lado del estadio. Desde antes, se comprometieron a no empañar el espectáculo y cumplieron.
“El público se comportó a la altura, las barras se comportaron a la altura, como se habían comprometido. No tuvimos problemas”, comentó Adolfo Hernández.
Fuera de esas movidas áreas de las barras, el resto era zona propicia para visitar con los hijos, nietos o abuelos. Todo en familia.
Si algo abundaba ayer en La Sabana era la seguridad, la publicidad y las ventas, sobre todo de “bebidas hidratantes”.
El calor de la mañana se disipó con la presencia de las nubes oscuras, mas la lluvia no apareció.
Cuando el pleito empezó, la afición siguió ajena los hechos. La violencia quedó en la cancha.
Para cuando el pleito terminó, ni la mitad de la afición quedaba en las graderías. Pocos se quedaron a observar la premiación.