El descontento y el malestar generados por las declaraciones brindadas por Valdeir Badú Vieira el domingo pasado, mantienen al técnico manudo con un pie afuera de la institución rojinegra, aseguró ayer una fuente cercana al club.
Las expresiones de Badú, calificadas por los directivos como "ofensivas y agraviantes", condujeron a los jerarcas erizos a formar una comisión que estudiará el caso y que, a la vez, tiene la potestad para tomar una decisión definitiva.
De acuerdo con el ambiente que se vive en la Liga, al parecer, la directiva en pleno está disgustada por el proceder del entrenador y uno de los requisitos para que dirija los próximos encuentros es que mantenga un silencio absoluto.
"De lo contrario se va", aseveró la fuente.
En la reunión que efectuaron los dirigentes alajuelenses el lunes anterior, el presidente Mario Chacón propuso la creación de la citada comisión con el fin de que evaluara, objetivamente, las manifestaciones del estratega.
La posición de Vieira, quien criticó a los directivos por ejercer presiones innecesarias sobre el equipo, al tiempo que los acusó de querer imponerle un defensor para que sustituyera a Mauricio Montero --entre otras cosas--, provocó una reacción inmediata de sus patronos.
De acuerdo con el informante, Vieira podría ser despedido dentro de cinco o diez días; de no ser así, posiblemente, un grupo de directores abandonarían las tiendas erizas.
Por su parte, el dirigente Jorge Ortega comentó que uno de los propósitos inmediatos es no perjudicar la participación del cuadro y que por ello no actuarán con el hígado.
Igualmente Wílliam Cordero --directivo-- sostuvo que le harán una recomendación a Badú para que no hable más del tema en discusión.
División
Las diferencias no solo se mantienen en el plano dirigencial, sino que además alcanzaron a la afición, la cual está dividida en torno al caso Badú.Un sector apoya sus argumentos y otro lo adversa y pide la cabeza del técnico.
Ortega precisó que en las oficinas del once erizo recibieron faxes a favor y en contra de lo afirmado por el suramericano.
Mientras tanto, en el equipo impera un clima de incertidumbre, al desconocerse cuál podría ser la palabra final de la directiva. Por su lado, Vieira manifestó que ayer se reunió con dos dirigentes manudos y que la idea de la comisión es lograr un acuerdo beneficioso para el plantel.
Agregó que no deseaba opinar más del asunto que lo llevó a criticar a la dirigencia rojinegra.
Manifestó, además, que continuará su trabajo con el entusiasmo de siempre y que está a la espera de acontecimientos.