Saprissa mirará hacia el frente pero dejará un ojo puesto atrás ante Alajuelense

Esa es la gran conclusión que se puede sacar de la propuesta que Rónald González planea llevar a Alajuela el próximo lunes, un partido del que dejó claro que el principal pecado de su equipo sería defender una diferencia demasiado pequeña por la pesada condicionante que es la ventaja deportiva.

“Yo tengo un lema que es que el equipo que llega a empatar pierde, casi siempre pasa. Voy a planificar el partido porque todavía nos faltan algunos días más, por supuesto que no vamos a llegar abiertos completamente, pero sí con mucha expectativa de atacar y hacer daño”, afirmó el timonel tibaseño.

González agregó que tampoco se puede pensar que el empate es el único camino que tiene Saprissa, porque ganar en el reducto erizo no puede verse como una idea imposible en esta serie.

“Si me llego a encerrar en Alajuela y me meten uno o dos goles como en los últimos partidos, se nos puede complicar todo, tenemos que ser un equipo ordenado pero sin nunca renunciar al marco de enfrente, ni tampoco pensar que el empate es nuestro único resultado, Saprissa ha ganado en Alajuela también y no veo por qué no podemos pensar en eso”, aseveró.

Variantes. Aunque la semana de Saprissa apenas se inició ayer, Rónald González también dejó ver posibilidades en el sistema con el que encararán el próximo clásico.

Con la bonanza de piernas las dudas ahora llegan a Tibás en forma de nombres, por ejemplo sobre cómo estará conformada la pareja de contenciones el lunes.

David Guzmán y Juan Bustos Golobio fueron dos puntos altos en la victoria 1-0 el domingo, pero si Yeltsin Tejeda logra recuperarse difícilmente se quede en el banco.

“Todavía hay que analizar bien qué es lo que vamos a hacer, evidentemente tenemos una base y una forma y línea de juego pero en nombres y hombres hay que determinar. Tenemos que ver la evolución de Yeltsin y Ariel (Rodríguez) y también el hecho de tener más recuperado a (Diego) Madrigal, eso lo terminaré de ver en esta semana”, aseguró el estratega.

Si Tejeda regresa, por ejemplo, es posible que Guzmán sea el sacrificado porque difícilmente lo será Golobio, menos después del partido que tuvo hace tres días.

También juega a favor del joven volante mixto que Manfred Russell parece haber encontrado un nicho un poco más arriba, allá en el extremo derecho donde todavía nadie ha logrado ganarse un cupo.

La puesta a punto de Madrigal también podría invitar a la vuelta a un 4-3-3 “más clásico” para Saprissa, con Diego Estrada como conductor en lugar de mediapunta, lo que podría dejar a Castillo fuera.

Pero esas son todas posibilidades dentro de un abanico de opciones que, al final, otra vez se le abrió a la ilusión saprissista.