Los santistas pasaron momentos de angustia ante los limonenses, pero al final encontraron la forma de sacarle réditos a la jornada libre de Cartaginés para escalar a la tercera posición del Verano 2012.
El partido de anoche en el Ebal Rodríguez casi que se jugó dos veces: primero fueron 45 minutos de nada y luego un complemento para lavarse la cara y ganarse a la poquísima afición que pagó su entrada.
Santos llegó al encuentro con el tercer lugar en la cabeza mientras que Limón buscaba alejar los males resultados y respirar un poco en el fondo de la tabla; al final, solo el primero cumpliría su objetivo.
Si en la parte inicial las oportunidades fueron prácticamente nulas, hay que destacar que fueron los visitantes quienes estuvieron más cerca de la anotación.
Mayron George tuvo un par de buenas oportunidades para Limón, pero el guardameta Minor Álvarez siempre supo responder con una mezcla de virtud y suerte.
Del lado local, Maximiliano Ardetti hacía hasta lo imposible por imprimirle dinámica a su equipo, pero todo su desgaste terminó siendo un esfuerzo en vano.
Limón olvidó su buen trabajo en defensa mientras que Santos se acordó del juego de toque que lo tiene en esa posición privilegiada en el actual campeonato.
Cristian Lagos cambió su papel de goleador y se dedicó a abrir juego para el equipo, primero sirvió a Erick Scott para abrir el marcador al 57' y luego repitió la cuota pero con Juan Diego Madrigal al 63'.
Ese 2-0 trajo tranquilidad al equipo dirigido por Eduardo Méndez, mientras que encendió todas las luces de alarma en el conjunto de Hernán Fernando Sosa.
El uruguayo se volcó al banquillo para intentar retomar el rumbo: Kurt Bernard y Kendall Wilson ingresaron para aportarle colmillo a un equipo urgido de puntos.
Las variantes surtieron efecto, aunque quizás demasiado tarde.
Limón empezó a manejar la pelota y a adelantar líneas, buscando por todos los medios el gol que los volviera a meter en la pelea.
La anotación llegó por medio de Bernard tras un cobro de tiro libre al 90', y aunque sea difícil de pensar, los dos minutos de reposición fueron una pesadilla para el Santos.
Al final la presión no bastó, Santos supo aguantar los embates y subirse al tercer lugar; Limón sigue en la lucha por el descenso.