Tegucigalpa, Honduras. Casi sin tiempo para calentar, pues la lesión de Yosimar Arias le obligó a entrar de forma apresurada, el sancarleño Álvaro Sánchez tuvo el viernes un debut de ensueño con la camiseta de la Selección.
Esto debido a que Sánchez, quien tenía a su cargo los hilos del mediocampo, consiguió el tercer y último tanto con que la Tricolor derrotó a Panamá.
“Gracias a Dios se me dio la oportunidad de poder anotar en una Copa Uncaf, y la verdad es que lo tomo con humildad; sé que esto me abre puertas, pero tengo que seguir mejorando si me dan el chance”, comentó el jugador ayer poco antes de la práctica regenerativa cerca de la piscina.
Sánchez aceptó que entró de forma apresurada al terreno de juego, pero luego, con el paso de los minutos, tomó confianza.
“Yosimar estaba haciendo un buen trabajo y es muy doloroso lo de su lesión, fue muy rápido, tuve que entrar casi frío, y aparte el partido estaba muy caliente porque estaban ‘volando’ mucha patada, pero conforme pasó el juego me acomodé y el gol me dio confianza”.
Aunque sabía que sustituir a Arias sería difícil pues este hacía una muy buena labor, Sánchez dice que él nunca perdió la esperanza.
“Uno siempre que está en la banca piensa en jugar aunque fuera un rato, lastimoso lo de Yosimar, pero me tocó entrar y creo que lo hice bien”, agregó el futbolista.
La pincelada de talento que puso en la cancha del Tiburcio Carías confirma su liderazgo en el conjunto de San Carlos, donde el pasado Campeonato de Invierno jugó en los 20 partidos de los norteños.
En dicho torneo el mediocampista de enganche marcó ocho tantos y puso siete asistencias, convirtiéndose en el mejor norteño en ambos departamentos.