Durante la presentación del nuevo patrocinador del equipo, lubricantes Roshfrans, el presidente de Liberia Mía, Luis Cubillo, expresó ayer que al llegar él al club se encontró con una casa desordenada.
Cubillo habló así al cuestionársele acerca de las deudas que tiene el equipo con jugadores, exfuncionarios y proveedores, entre otros.
“Si le debo plata a alguien debería de buscar la forma de pagarle”, comentó ayer el jerarca.
Ante la pregunta de por qué no le han cancelado al Comité Cantonal de Deportes de Liberia el alquiler del estadio Edgardo Baltdodano, que ya tiene seis meses de atraso ($18.000 en total), Cubillo fue enfático al contestar que “Liberia Mía no debe ni un cinco al Comité”.
Además, cuando se le preguntó por qué Ángel Arce, expresidente de Liberia, y Mario Sotela, propietario, no dan la cara ante dichos cuestionamientos, el nuevo jerarca alegó que no lo sabe.
“No he hablado con Ángel (Arce) desde hace días, no puedo responder por sus acciones. No estoy aquí para defender a don Mario Sotela, no estoy diciendo que don Mario no dé la cara, lo cierto es que en el equipo existe un presidente, y el presidente está dando la cara”.
Entre los acreedores de Liberia Mía se encuentran empresarios de buses de la localidad, entrenadores, fisioterapeutas y jugadores que solicitan su desinscripción.
“Estoy llegando hace tres meses, eventualmente podrían existir deudas, no estamos desconociéndolo, haremos frente si hay que pagar –a empresarios–”, indicó.
Cubillo informó ayer de que el equipo contrató por un año al defensor Berny Peña, quien pertenecía al Brujas, y al portero Eduardo Sánchez, del Motagua catracho.
“Este es un equipo, como todos, que ha pasado por momentos complicados. Como le dije, estamos ordenándonos”, añadió el jerarca.