Belén. Ayer quedó prácticamente listo el plan que Óscar Ramírez y el Alajuelense utilizarán mañana en el partido de vuelta de los cuartos de final de la Concacaf. Eso sí, nada impide que el detallista estratega rojinegro haga cambios de última hora después de reconocer la gramilla del Rommel Fernández y medir el ambiente de Panamá.
El avión que lleva a la Liga sale temprano hoy miércoles y en él no viajarán dos de los generales de mayor confianza del Machillo: Johnny Acosta y Juan Gabriel Guzmán no se recuperaron a tiempo de sus respectivas lesiones.
Son bajas sensibles en cuanto que se trata de hombres de finales.
Mas no hay pasmo ni desconcierto. Ninguno se entrenó con regularidad en Conducen, terreno en el que los erizos se han preparado los últimos días. La verdad es que Ramírez tampoco andaba muy dependiente del veredicto médico.
La alineación que usará ante el Árabe Unido, sea cual sea, nunca pareció incluir a esos dos ni al novato Rónald Matarrita, quien en tres meses se ganó el puesto de titular y fue de la partida en el empate sin goles de la ida. El problema es que en ese primer encuentro ante los panameños el joven extremo izquierdo salió bastante golpeado, lo suficiente para que no haya ingresado en la lista definitiva para mañana.
Esa lista, que tiene 20 nombres, sí lleva inscritos a los futbolistas más regulares de la actual Liga y regresan nombres como Elías Palma (sancionado para el juego en el Morera Soto) y Armando Alonso (lesionado desde el clásico).
Palma no será de la partida, Ramírez casi confirmó a Kevin Sancho en la línea de tres porque “da cierta funcionalidad dentro de lo que es ofensivo y cumple en el tema de defensiva”. Aunque seguramente Elías estará listo para ingresar si hay que proteger el marcador.
Igual es el caso de Caya. Él seguramente iniciará en la banca, pero aportara agilidad y experiencia al naipe de opciones que barajará Ramírez en un partido que puede tener muchas caras distintas.
La columna. En el avión estaba previsto que viajaran el portero Patrick Pemberton, el capitán Porfirio López, el contención Ariel Rodríguez y los delanteros Jerry Palacios y Jonathan McDonald. Las vértebras del esqueleto manudo.
Mientras que los otros 12 jugadores van advertidos: tienen que estar “puntita al pie” (lema del equipo) porque a cualquiera de ellos le puede corresponder colocarse sobre los hombros esos sueños de una Liga que aspira a llegar más allá de estos cuartos de final.