Orión ganó ayer los primeros tres puntos en su regreso al futbol de la primera categoría.
Los nuevos inquilinos vencieron por 1-0 a un aguerrido Limón, en un juego desarrollado en el Jorge
Walter Cheves fue, por mucho, el mejor de los dirigidos por Fernando Sosa; sin embargo, el mediocampo orionista no capitalizó el aporte del exliberiano, ni explotar la ventaja de un hombre más en la cancha por la expulsión tempranera del caribeño Ricardo Harris.
Por izquierda, por derecha, por el centro, Cheves se combinaba y animaba a los laterales y aprovechaba el poco aporte de los delanteros. Cuando le faltó compañía, no le importó: solo se bailó a uno, dos, tres... todos los defensores limonenses que pudo antes de ser detenido por una patada.
El primer tiempo fue de Orión animado por el ex de Liberia Mía, quien también recuperó balones y acomodó el juego desde atrás.
Aún así, a los azulgranas les faltó llegada, no encontraron la fórmula para sobrepasar a los espigados defensores caribeños.
Solo hubo una ocasión, al minuto 7, cuando Limón perdió la marca y permitió que Erick Cabalceta anotara de cabeza el único gol del encuentro, tras un tiro libre cobrado por Sergio Martínez.
En el 17’ se dio la ridícula expulsión de Harris por una supuesta falta contra su excompañero William Sunsing.
Este hecho no cambió mucho el partido. Limón entró dormido al partido y así continuó hasta que la falta de un hombre lo obligó a cambiar al defensor Geiner Barthley por Waylon Francis.
Entonces sí que se revolucionó el libreto. La media pasó a ser posesión caribeña. Todas las bolas eran recuperadas por los limonenses gracias a su superioridad física.
Esas segundas bolas Limón las convirtió en pelotazos certeros para que sus delanteros mataran por velocidad a la estática defensa del Orión, especialmente el joven Andrey Francis (un dolor de cabeza por rápido y alto).
Empero, la arremetida de los verdiblancos no dio réditos, por culpa de ese añejo mal que aqueja nuestro futbol: la falta de definición. También influyó las atrapadas salvadoras de Carlos Díaz.
Al 73’, el orionista Kevin García se hizo expulsar a solo dos minutos de haber sustituido a un agotado y golpeado Cheves.