La convocatoria de Keylor Navas a la Selección Nacional le dará un respiro luego de vivir días convulsos en el Real Madrid, al estar siendo cuestionado por los medios de comunicación españoles por su desempeño en la cancha.
Cada partido se ha convertido en un juicio para el tico, no solo por parte de la prensa, sino de la grada del Estadio Santiago Bernabéu que lo silba, pero también le aplaude. Así sucedió en su último juego ante el Betis, en el que falló en una ocasión que se tradujo en gol, pero con una tapada descomunal en tiempo de reposición, salvó lo que hubiera sido el empate en la última acción del encuentro.
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El seleccionador Óscar Ramírez considera que Navas podrá desahogarse y por unos días vivir la fiebre que genera la Sele, donde su seguridad y liderazgo es incuestionable.
El estratega destacó la fortaleza mental de Navas para afrontar las críticas en el cuadro merengue.
"Todos sabemos lo que es Keylor, si hay alguien en este país con una fuerza mental tremenda, es él. Venir acá es un orgullo para él, siempre, sabiendo el tipo de liderazgo que manifiesta en los entrenamiento y en el mismo partido. Le puede servir para despegarse un poco de lo que pasa allá", dijo Ramírez ante la consulta de La Nación.
El Macho considera que parte de la presión es porque el Madrid se caracteriza por tener en su arco al meta de la selección de España.
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"Es piedra en el zapato porque históricamente el portero del Real Madrid es el de la selección de España. Deberíamos sentirnos orgullosos de tener un tico con esa capacidad y que siempre va para adelante. Estoy muy contento que venga, en algún momento hablaré más tranquilo con él, para ver su sentir", añadió.
Navas vendrá a la Tricolor para los duelos ante México y Honduras del 24 y 28 de marzo, respectivamente, pero luego deberá hacerle frente a un mes clave en sus aspiraciones en el club blanco.
Cuatro duelos de alto impacto esperarán a Keylor una vez que regrese a las órdenes de Zinedine Zidane. Se trata de los retos ante el Atlético de Madrid y Barcelona en la liga local, y contra el Bayern Múnich en los cuartos de final de la Champions League.
El 8 de abril será anfitrión de los colchoneros en el Santiago Bernabéu. Tres días después disputará el juego de ida en su serie frente al cuadro alemán, de visita.
Posteriormente, el 18 de ese mismo mes recibirá al Bayern en el duelo definitorio de la Champions. Tres días después jugará en casa ante el Barcelona en el clásico español.