Confeso enemigo del rumbo que para él estaba tomando el futbol de Costa Rica, Jorge Hidalgo se caracterizó en buena parte de su gestión por ser la principal cara de la oposición en muchos de los temas que surgieron en el seno de la Unafut y sus afiliados.
El formato actual del campeonato, la posibilidad de un “pague por ver” en nuestro futbol y el cambio de franquicia entre Barrio México y Liberia Mía son solo algunos ejemplos de temas contra los que luchó el ahora exjerarca de la institución manuda.
“Al principio no era ni posible ni deseable meterse de lleno a combatir los problemas del futbol nacional, pero poco a poco y con nuestra posición hemos logrado que algunos dirigentes vean que no estábamos equivocados, y entonces ahora sí nos metemos más, ya es tiempo”, afirmó.
“La prensa y el público vio que es un error el formato, que es un error pagar caprichos de salarios y no reportar lo que corresponde a la Caja y que es un error que una misma persona controle dos equipos... Que debe acomodarse la industria del futbol a la legalidad y la inteligencia para que sea un espectáculo deseable”, expresó el ahora fiscal manudo.
Lejos de acusar cansancio, Hidalgo explicó que más bien fue reconfortante ser parte de la minoría en muchas de las decisiones.
“Eso más bien fortalecía el deseo por convencer y mejorar, no importa ser minoría, sino tratar de convencer, porqué los torneos cortos no sirven, dado que económicamente no funcionan”, dijo.
Aún así, el jerarca no estuvo ausente de la polémica, precisamente su posición lo puso muchas veces en boca de otros dirigentes, e incluso el expresidente de la Unafut, Joaquín Hernández, lo acusó de insultarlo y amenazarlo.
“Esa supuesta llamada responde a las aspiraciones personales de unos pocos con el interés de botar a don Eduardo Li de la Federación. Cuando la Unafut cometió la barbaridad de aprobar el cambio de franquicias entre Barrio México y Liberia yo llamé a don Joaquín para hacerle ver mi molestia (...). Admiro de él la capacidad de recordar dos páginas de conversación entrecomilladas, pero lo que dije o él dice que dije son cosas que se deberán dilusidarse en otra parte”.