Por primera vez desde que llegó a Saprissa, a mitad de año, Kevin Briceño salió del camerino para recibir abrazos de felicitación –y no de consolación– de su novia y su familia. El joven portero morado quería disimularlo, pero en el rostro se le veía el orgullo del deber cumplido.
Una expresión de satisfacción prácticamente ajena para los porteros morados en lo que iba de este campeonato.
“Esto me ayuda a seguir trabajando de la misma manera, o más de lo que lo he venido haciendo. Lo que queda es seguir por el camino de la victoria, con esfuerzo, sacrificio”, comentó Briceño luego del partido en el que tuvo una labor destacada para vencer por 0-2 a la Liga.
Kevin figuró el campeonato pasado en el Uruguay de Coronado y llegó este Invierno a Saprissa como una promesa a futuro, casi sentenciado a ser el tercer portero. Sin embargo, las malas actuaciones de Danny Carvajal y Donny Grant le han abierto las puertas para luchar de tú a tú por ser el estelar en la meta morada.
Briceño firmó ayer su primer valla invicta como saprissista. En cinco partidos anteriores había recibido nueve goles y también fue víctima de las constantes críticas de la afición. Tanto que el entrenador Jeaustin Campos lo tuvo que defender durante buena parte de la semana.
“Jeaustin me lo dijo: ‘no te voy a quitar que seas el titular’. Siempre he trabajado desde que llegué y siento que he madurado en mucho porque aquí en Saprissa las cosas cambian”, agregó.