Heredia. Sea mental o físico, en realidad esto no importa mucho, el Herediano ha adquirido un tono en su juego que anoche le hizo adueñarse de la cima del Torneo de Invierno.
A pesar de que su fútbol no es tan expedito y lujoso como el del arranque del campeonato, el Campeón Nacional sustenta su dominio con el vértigo que le aportan sus laterales, la fineza de Yosimar Arias y la solvencia de tres años con la misma planilla de futbolistas.
La cabalgata de fútbol que hoy esboza el Herediano ha crecido pese a que la ubicación de dos contenciones hizo presagiar un equipo con poco peso ofensivo, contrario a lo que dio en las primeras fechas.
Pero esta falencia se ha ido opacando debido a que Anllel Porras, Dave Myrie, y, últimamente, Verny Scott, son motores que van y vienen sin necesidad de mucho combustible. Ellos, junto al ingenio de Yosimar Arias, son los que han revolucionado este combinado.
Aunque una expulsión en el primer partido frente a Saprissa opacó un poco su importancia, Myrie es hoy pilar en la columna vertebral que Marvin Solano montó.
Es por esto que no sorprende el que Myrie, con ayuda incluida, marcara el primero con un zapatazo que desvió Fernando Paniagua.
La conquista desdibujó el orden incipiente que pretendía la U, y asentó las intenciones locales.
Con aquella anotación Herediano comenzó a mover la pelota, a encimar a los celestes, y a mostrar otra vez el fútbol que hacía ocho días tumbó 3-0 al Saprissa.
Producto de ese tono, llámelo muscular o mental, como se prefiera, vino una de las mejores jugadas del partido, cuando Anllel se la dio a Waylon por la izquierda, este más atrás a Granados, y el contención, fino en el toque, la sirvió para que Yosimar, en el área, se la dejara de primera a Anllel para que sacara un remate elevado y amenazante.
No es la primera vez que se suman más de cinco pases en una combinación florense, donde, casi siempre, está la mano de Yosimar.
Y fue esta pequeña bujía la que sirvió el segundo tanto, al 18’, cuando lanzó un tiro de esquina que Minor Díaz desvió de testa al fondo.
Toque de cara. Con la desfachatez que se le vio desde que regresó a la categoría mayor, la UCR, muy bien dirigida por José Giacone, le tocó la cara al campeón gracias a un penal que marcó Jameson Scott luego de que Myrie, talento rebelde, botara en el área a Jorge Barbosa.
Pero la conquista no fue más que una anécdota de camerino, ya que dos minutos más tarde, al 66’, el velocista Anllel Porras desperdigó rivales y sacó un remate de comba que puso el tercero y el respiro.
Poco antes del lujo de Porras, candidato a la Selección Nacional, había ingresado Mambo Núñez, ídolo de la feligresía que quiere botar el récord de Errol Daniels.
Pese a que aún no lo supera, Núñez si lo alcanzó, pues al 83’, mediante castigo de penal, hizo el cuarto y su tanto 196 en Primera.
La noche, lluviosa casi todo el juego, cerró el grifo para que la celebración fuera total y para que Herediano, quien amanece líder, terminara de devorar entonado con las victorias y su fútbol de vértigo.
Herediano 4-1 Universidad de Costa Rica
Herediano: Leonel Moreira 7, Keilor Soto 7, Waylon Francis 7, Pablo Salazar 7, Dave Myrie 7, Verny Scott 7, Esteban Granados 6, José Miguel Cubero 7, Yosimar Arias 7, Anllel Porras 8 y Minor Díaz 7. D. T: Marvin Solano.
Cambios: Víctor Núñez 7 (Minor Díaz, 55’), José Sánchez 6 (Verny Scott, 64’) y José Cancela - (Yosimar Arias, 80’).
Universidad de Costa Rica: Carlos Méndez 5, Róger Fallas 4, Jameson Scott 6, Jason Scott 4, Mauricio Mora 5, Andréz Núñez 4, Fernando Paniagua 5, Yeremy Araya 5, Jonathan Sibaja 5, Sergio Hernández 5 y Jorge Barbosa 6. D. T: José Giacone.
Cambios: Víctor Gutiérrez 5 (Sergio Hernández, 73’), Brandon Poltronieri - (Yeremy Araya, 79’) y Johel Hall - (Jonathan Sibaja, 80’).
Goles: 1-0 (4’): Dave Myrie. 1-0 (18’): Minor Díaz, pase de Yosimar Arias. 2-1 (64’): Jameson Scott, de penal. 3-1 (66’): Anllel Porras. 4-1 (84’): Víctor Núñez, de penal.
Árbitros: Andrés Alpizar 7, Octavio Jara y Christian Foster como asistentes
Estadio: Eladio Rosabal Cordero, Heredia. 8 p. m.