En Herediano no quieren festejar antes de tiempo, pese a tener una cómoda ventaja de 3-0 en la final del Verano.
Los jugadores florenses destacan la mesura como la característica principal de su discurso de cara al juego de vuelta en el Ricardo Saprissa (3 p. m.).
Óscar Esteban Granados, volante rojiamarillo, recordó que hace cuatro años a ellos les tocó buscar una remontada ante Cartaginés, luego de perder 3-1.
Eso sucedió en el 2013 y el futbolista afirma que lo malo de los brumosos fue celebrar antes de tiempo.
"Creo que tenemos una experiencia de cuando Cartaginés nos ganó y pudimos remontar. Hay que estar tranquilos porque cuando el Saprissa juega en su casa es otro equipo", señaló.
Ese tipo de pruebas y las finales disputadas en los últimos años hacen que en el seno herediano eviten sentirse ganadores.
Otra experiencia que marcó a los rojiamarillos fue el triunfalismo anticipado en diciembre del 2011. Herediano sacó a la venta camisetas con la leyenda de campeón por el frente y el número 22 en la espalda, en alusión al título que esperaban conseguir ante la Liga. Había empatado 1 a 1 en el Morera Soto, en el primer partido de la final, ante una Liga muy diezmada, que parecía incapaz de sobrevivir en el Rosabal Cordero; pero lo hizo, con otro 1 a 1 y triunfo en penales.
Hoy, Herediano se muestra lejano a semejante triunfalismo prematuro.
"Tenemos un camerino y dirigencia muy maduros, quedan 90 minutos contra un rival duro, aquí no hemos ganado nada y tenemos mucha calma y concentración", resaltó el asistente técnico Mínor Díaz.
Para los futbolistas del Team lo más complicado está por venir, pues jugarán ante un equipo herido, tirado al frente para buscar las anotaciones y jugando en casa.
"Aquí no tenemos manos en ningún título, estamos trabajando para lograrlo. Estamos tranquilos porque hicimos un buen trabajo en la ida, pero falta lo más difícil", apuntó Leonel Moreira.
Herediano busca su título 26 en la historia del fútbol costarricense.