Mitad en broma, mitad en serio, los aficionados al fútbol nacional afirmaron en la última semana que a los tamales, el pasito y la cena navideña se agregó una nueva tradición decembrina: la final Alajuelense-Herediano.
Como ha ocurrido desde el 2010, manudos y florenses disputarán este diciembre el título del Torneo de Invierno.
Para reforzar esa imagen de tradición, las tres recientes finales entre ambos equipos son casi copias al carbón: juegos cerradísimos, tiempos extra, victorias agónicas y el mismo campeón.
Sin embargo, este diciembre, algo será distinto en el duelo por el título de la Primera División. Erizos y rojiamarillos llegarán mañana al primer juego de la final haciendo alarde de su mayor rendimiento en los últimos tres Inviernos. Tanto Herediano como Alajuelense saltarán este lunes a la cancha del estadio Alejandro Morera Soto ostentando la mejor cosecha que hayan recogido en estos certámenes.
Luego de 24 partidos disputados este Invierno (22 de fase regular y 2 en semifinales), el Team suma 55 puntos de 72 posibles, para un rendimiento del 76%.
Los dirigidos por Marvin Solano no solo superaron el 68% con el que llegaron a la final del 2011, sino que impusieron récords de goles (49), puntos (49) y rendimiento (74%) en la historia de los torneos cortos.
El único apartado en el que quedó debiendo el actual campeón nacional es el de goles en contra, pues enfrentará la final con la mayor cantidad de goles encajados en los últimos inviernos, 23.
“Herediano anda muy bien, muy fuerte y terminó dando un buen rendimiento con un sistema al que puede agregar muchas variantes ofensivas; pero hay que respetar mucho a Alajuelense, un equipo de finales, de tradición, con buenos jugadores”, afirmó el extimonel florense Orlando de León.
Precisamente, los manudos arriban a la lucha por el título con un rendimiento del 69%, luego de sumar 50 puntos en los 24 partidos disputados este torneo.
Con esos números, los manudos dejaron atrás el 66% de rendimiento con el que alcanzaron la final del Invierno 2012, en la que obtuvieron el título en tiempo extra.
A diferencia de los florenses, el plus de los rojinegros para esta final será la poca cantidad de goles recibidos, 19 en 24 juegos.
“El grupo que tengo ahora es diferente, es cierto que es fuerte pero también Heredia es un grupo fuerte. Todas las finales son diferentes, todas tienen su ingrediente”, aseguró Óscar Ramírez, técnico manudo en las tres finales.