El traslape entre el calendario de los campeonatos nacionales y la Liga de Campeones de la Concacaf ha obligado a los clubes con participación internacional a depender de la “buena voluntad” de sus rivales para intentar acomodar lo mejor posible sus partidos.
En la pasada asamblea de presidentes de la Unafut , Herediano,Saprissa y Alajuelense intentaron negociar para reacomodar las jornadas 9 y 10, que chocarán con los partidos de ida de los cuartos de final de la Concachampions . Sin embargo, aún no se ha definido nada.
Ese es el trajín de los clubes que juegan el torneo internacional: pueden reprogramar, pero no siempre se acomodan de la mejor manera.
“Es buscar el apoyo de la gente que está alrededor de la industria del fútbol para acomodar fechas, agendas, partidos... Porque los calendarios siempre van a estar apretados (...). Necesariamente se requiere un cambio y una reestructuración de la forma que jugamos los campeonatos para apoyar a los clubes y a la Selección Nacional”, comentó Marco Vásquez, vocero de Alajuelense.
El directivo erizo apunta que es complicado encontrar una solución, pues disminuir el número de juegos afectaría a los equipos que no juegan en la Concacaf.
“Habría que analizarlo a la luz de los torneos, porque no siempre vas a jugar torneos internacionales. ¿Qué pasa si quedás eliminado y no llegás a las instancias finales de un torneo corto?”, dijo.
Para Jafet Soto, gerente del Herediano, hay que entrar en conciencia de que los equipos ticos ya se han hecho recurrentes en la segunda fase de la Concachampions y hay que empezar a aplicar esa experiencia para mejorar el acomodo del calendario.
Mientras que Juan Carlos Rojas, presidente de Saprissa, opina que se debe mejorar la calendarización pero no cambiar el formato de los torneos cortos. Colaboró el periodista Miguel Calderón
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